El Teruel y el Guaguas rindieron ayer un sentido homenaje al buen voleibol. El conjunto grancanario cayó con la cabeza alta en su visita a la cancha del líder en un encuentro digno de dos de los máximos aspirantes a hacerse con el título de la Superliga Masculina de voleibol. Partido vibrante, lleno de alternativas, de los que hacen afición. Finalmente, los locales se llevaron la victoria por 3-1 (25-21, 22-25, 25-20 y 25-21) ante un rival que siempre dio la cara. Gran actuación de Filip Gavenda en la escuadra aragonesa, convirtiéndose en el máximo anotador del choque con 24 puntos; mientras, Matt Knigge, con 19, acababa como máximo anotador de los amarillos.

Un error en la recepción de los turolenses permitía al Guaguas inaugurar el marcador, pero Gavenda se encargaba de colocar la igualada en la siguiente jugada, entrando el partido en una fase de plena igualdad, tanto en los errores como en los aciertos, lo que derivaba en una alternancia continua en el marcador.

Los locales aprovechaban la eficacia en el saque de Jordi Ramón para cobrarse una ventaja de dos puntos (9-7), que permitía a los hombres de Miguel Rivera dominar el marcador en un primer asalto en el que los errores en la recepción de los locales daba la vida a los amarillos, que no terminaban de imponer su juego.

El nuevo paso de Jordi Ramón por el saque volvía a ser decisivo para un Teruel que aumentaba su ventaja en el marcador, sacando el máximo partido a la efectividad de Gavenda, Parrés y el propio Jordi Ramón, para cerrar con cierta claridad el primer set por 25-21.

La igualdad volvía a hacer acto de presencia en el arranque del segundo set, con el Guaguas intentando romper el marcador ante un Teruel que no cedía en su persecución. Los hombres de Sergio Miguel Camarero se encomendaban a la contundencia de Kukartsev en la red, a los ataques fulgurantes de Almansa y a la fiabilidad de Moisés Cezar en el bloqueo para tomar una pequeña renta de tres puntos (10-13).

Empate amarillo

Los visitantes seguían liderando el electrónico hasta el 12-18. La mejoría posterior de los aragonenses la cortaba el técnico grancanario con dos tiempos muertos consecutivos. Su equipo reaccionaba y empataba el duelo 22-25 (1-1).

La tercera manga tuvo un inicio alocado. Un parcial local de 4-0 obligó a Camarero a parar el partido, con lo que se lograba revertir la situación con un 0-4. Con empate a 10, el Teruel cogía los mandos para ponerse 18-15, lo que llevaba al técnico grancanario de nuevo a pedir tiempo.

El cuadro isleño lo intentaba, pero a pesar de los errores de su rival, Ereu y Gavenda se ponían el traje de faena para cortar por lo sano. El tercer set se cerraba con un remate mortal de Bugallo que suponía el definitivo 25-20 (2-1).

El Guaguas afrontaba la cuarta manga con la necesidad imperiosa de sumar la victoria parcial para forzar la muerte súbita ante un Teruel que comenzaba por delante. Con 8-5, reaccionaron los amarillos y llegaba el duelo a su fase crítica con 16-13 en el marcador.

Vibrante final

Los errores locales mantenían vivo al Guaguas, que recurría a Kukartsev para colocar el 20-20 y desatar los nervios en el banquillo de un Teruel que encontraba en Ereu y Gavenda el remedio para batir a la escuadra grancanaria en el que a la postre sería la manga definitiva por 25-21.

El cuadro aragonés conseguía mantener así su supremacía en la tabla clasificatoria de la Superliga Masculina, pero el Guaguas demostró que tiene argumentos para disputarle el título.