Una torreta de iluminación del campo municipal de Vecindario no soportó las fuertes rachas de viento –hasta más de 100 kilómetros por hora– y cayó sobre el césped artificial del recinto del municipio de Santa Lucía.

El viento, que castigó a toda Gran Canaria, sobre todo en el interior y en el Sureste de la Isla, tumbó una de las torretas del recinto municipal. Este hecho hace que los partidos de esta semana de los dos equipos que juegan como local en este estadio, el Vecinklubf y el Cerruda, corran riesgo de aplazamiento, sobre todo aquellos que se disputen con falta de luz solar. La zona de Vecindario fue una de las más afectadas por el coletazo de la borrasca Filomena, que dejó copiosas lluvias en la cara sur de Gran Canaria. La caída de esta torreta fue una de las incidencias en la localidad, donde una farola derribada también por el viento afectó a tres vehículos sin causar, como en este hecho, daños personales.