Llegó la cuarta victoria del año. 17 puntos que saben a gloria para el Tamaraceite. La mejor manera de reponerse para los capitalinos después de haber caído la semana pasada frente al San Fernando por la mínima. Los puestos de honor están a tiro de piedra para el proyecto glorioso del equipo del barrio grancanario.

Un bloque compacto, pocas concesiones, talento en la medular y sacrificio en la zona de ataque son las consignas de un equipo que muestra una solidez sublime. Seis goles en contra en once choques mantienen al Tamara en la pomada del Grupo IV-A.

Arrancó la contienda con un ritmo vertiginoso. El Linense quiso amedrentar al conjunto de Chus Trujillo desde el minuto 1 con una presión alta en la salida de balón de David González, tan necesaria en el equipo blanco. Atosigar al Moco era la consigna de Antonio Calderón, ex técnico con pasado en Primera y del Tenerife entre otros clubes de postín del panorama nacional.

Pasados los diez minutos, la circulación de balón ya fue menguando en cuanto a velocidad y ahí los capitalinos se empezaron a encontrar más cómodos con opciones de ir estirándose poco a poco a medida de que la posesión recaía en las botas insulares.

A falta de ocasiones sobre las porterías, David García intentó una pillería en el 16’ de la primera parte cuando lanzó una falta inocente en el centro del campo directa sobre el arco de Nacho Holgado. El tiro se marchó cerca del poste derecho. Los galones del jugador con más presencias con la camiseta de la UD Las Palmas todavía lucen en los campos nacionales, tanto como para hacérselo ver a los árbitros, a quien no duda en presionar a cada choque entre rivales.

Bien replegado el conjunto que ayer vestía de verdinegro, sustituyendo a los tradicionales albinegros de La Balona, no concedía oportunidades para el Tamaraceite. Sin la entrega y pelea de Asdrúbal Padrón en la punta de ataque por tener que cumplir dos partidos de sanción, Eros tenía la responsabilidad de acometer la portería andaluza.

Trenzó una jugada de más de 30 pases el Támara, dos minutos de posesión de balón continua, en la que bailó al son de López Silva y sobre todo de David González, la medular era cosa de estos dos jugadores que bien podrían estar en categorías superiores a la de bronce si no fuera por la fecha del DNI. Calidad de sobra en sus tacos.

La solvencia del ‘Támara’ atrás le ha llevado a encajar solo seis goles en 11 partidos

“¡Por detrás sin balón!”, una entrada fuerte al tobillo de Toni Robaina empezó a molestar a los ánimos locales. Los pocos presentes en el Juan Guedes protestaron a Miguel García, el trencilla de la contienda, para intentar hacerle ver la dureza de una serie de faltas de los andaluces que finalmente terminó fructificando con la primera tarjeta amarilla para la Balona, de Francisco Candela, al golpear en el costado a Eros.

Al descanso se llegó con la sensación de que a la contra había tenido mayor peligro el Linense, pero con tiros que llevaban la marca de una pólvora mojada, inefectiva. Por contra, Trujillo iba a tener que reajustar piezas de cara a la segunda parte en el vestuario si quería sumar tres puntos en casa. La opción de Robaina en la mediapunta ni daba el último pase, ni basculaba en las salidas tras recuperar balón el contrario. No quiere ser el revulsivo de este equipo desde el banquillo, pero va a tener que demostrar más si quiere hacerse con un sitio en el once.

Cambio de dinámica

Regresó con más presencia en ataque el conjunto del barrio capitalino. “Van a buscarle más”, se escuchaba por parte de la defensa visitante a los balones que le estaban llegando al Moco. Y lo sabían, porque la manija del 10 dictó el primer gol de la mañana.

Un pase a López Silva al costado permitió al extremo insular que pusiera la bola con mimo en el área chica, un regalo a la cabeza de Eros, que solo tuvo que poner la frente para que el cuero atravesara la línea de cal y se liberara el júbilo entre la escasa familia tamaraceitera que puede entrar en el feudo grancanario.

14

UD Tamaraceite-Linense Andrés Cruz

No quedó ahí la cosa para los de Trujillo. Las indicaciones tras el descanso debieron ser claras para que sus hombres se lanzaran con mayor voracidad sobre el campo rival. Un tiro de Robaina desde 25 metros que provocó el ¡uy! entre los 22 protagonistas al pasar rozando la escuadra de Holgado, fue el reflejo de que todo el Tamara había ganado en confianza.

No debía tampoco relajarse el cuadro blanquiazul a pesar de ir por delante en el marcador y gozar del control del partido, pues lo de Calderón no iban a rendirse tan fácilmente. Su hoja de ruta iba a continuar por la de pegar fuerte y esperar a robar balones con los que salir rápido contra la meta local.

Esa dureza visitante, que no cesó en los 90 minutos de juego, cayó sobre la cabeza de Nauzet García en un balón dividido en el área del guardameta canario. Alhassan Koroma no lo dudó ni un segundo y fue con todo a intentar rematar el balón y lo que se llevó por delante fue al portero. Falta, pero las tarjetas no se veían en el Juan Guedes.

A quince minutos del final el ritmo volvió a incrementarse. Los de Calderón no querían irse con las manos vacías en su visita a Gran Canaria y comenzaron a desdibujarse. En esa apertura de líneas, el Tamaraceite se contagió y quiso jugar al ritmo andaluz, mientras Trujillo gritaba desde su banda: “Tranquilos, muevan el balón de banda a banda”.

Se agitaron los banquillos para dar más oxigeno de cara a los minutos finales. Los nervios ya se habían apoderado de los dos conjuntos. Tres puntos en este nuevo formato liguero con menos equipos en los grupos son oro puro.

El descontrol temperamental se perpetró con un manotazo de Fabrizio Danese a Héctor Marrero. Salto entre ambos para disputar un balón y el del Linense se le fue el brazo para golpear el rostro del 8 blanco. Cayó como un saco de papas al césped y ahí a rascar segundos para el pitido final. ¿Resultado de la amonestación? Amarilla. Poco riguroso el colegiado.

Aguantó con solvencia el cuadro insular, sin conceder ocasiones sobre su arco y sumó de nuevo en el Juan Guedes para ponerse con 17 puntos en la tabla.

Trujillo: “Toni Robaina ha dado un paso adelante”

Toni Robaina Segura demandaba durante la semana que no quería ser “un revulsivo” en este equipo y Chus Trujillo le dio la alternativa en el once en el encuentro de ayer ante el Linense. El ex de la UD no defraudó para el técnico del Tamaraceite, que valoró la actuación del mediapunta con buena nota. “Toni ha dado un paso adelante para asentarse como titular en este equipo”. Aun así, el entrenador también remarca que tiene que “encontrarle su espacio”, ya que en el dibujo que plantea Trujillo en su equipo, el perfil de jugador de Robaina choca con el de otro pelotero como David González. El míster del conjunto capitalino elogió “el trabajo sin balón” del hijo del también Toni Robaina. “Se movió muy bien a la espalda de los centrales del Linense, fue muy vertical y hoy -por ayer- dio muestras de algo impropio en él que es la intensidad cuando no tiene el balón en sus pies”. Sustiutido el número 3 del Támara en el minuto 65, desveló el entrenador blanquiazul que le comentaba a Pachi Castellano -su segundo- que iba a “quitar al mejor jugador sobre el terreno”. Aun así, como bien explicó en la rueda de prensa posterior al partido, fue porque notó “fatigado” al centrocampista y “el partido pedía otras cosas para aguantar el marcador”.  | D. R. P.