Que la pareja de árbitros grancanaria formada por Ángel Sabroso y Óscar Raluy estén en un Mundial es casi normal. Con una carrera repleta de finales, con el partido por el oro en los Juegos Olímpicos de Río 2016 como cúspide, la cita de Egipto es su sexto Mundial consecutivo tras Suecia 2011, España 2013, Qatar 2015, Francia 2017 y Alemania/Dinamarca 2019. Ahora, a falta de confirmación oficial, y sin España metida en la pelea para ganar su tercera estrella, Sabroso y Raluy serán designados para arbitrar la gran final del torneo entre Suecia y Dinamarca.

Sabroso y Raluy ya saben lo que es arbitrar una final del Campeonato del Mundo (Suecia 2011). Ahora tendrán la oportunidad de volver a impartir justicia en un partido por el oro. Al fondo de la temporada figuran los Juegos Olímpicos de Tokio como un broche final al que aspiran.

Dos décadas después

Las selecciones de Dinamarca, vigente campeona del mundo, y de Suecia, que veinte años después volverá a pelear por el oro universal, disputarán la gran final del Mundial de Egipto, tras imponerse este viernes a España (33-35) y Francia (26-32), respectivamente (16.30 horas, Teledeporte).

Dos triunfos, que llegaron desde la pizarra, ya que tanto el técnico danés Nikolaj Jacobsen, como el seleccionador sueco, el noruego Glenn Solberg, ganaron la partida a sus homónimos españoles y franceses.

Pese a que Dinamarca acostumbra a usar con frecuencia el ataque con siete jugadores de campo, nunca, como ocurrió este viernes ante España, lo había utilizado desde el primer instante del partido. Una arriesga apuesta que no pudo salir mejor al conjunto danés, que superó, de partida, a una defensa española que nunca llegó a alcanzar su nivel habitual.

El conjunto danés, que tendrá la posibilidad de revalidar el título que conquistó hace dos años en el Mundial de Alemania y Dinamarca. Para ello, la selección danesa, en la que una vez más volvió a jugar un papel fundamental el lateral Mikkel Hansen, autor de doce dianas, tendrá que derrotar el próximo domingo a Suecia, que selló le billete para la última ronda, tras vence este viernes por 26-32 a Francia.

Una victoria que dejó al descubierto las carencias de un equipo francés, que volvió a ser víctima de los mismos problemas, la portería y la falta de un director de juego, que ya condenaron a los galos en el último Europeo.