Alejandro Balde e Ilaix Moriba, dos de las perlas de la cantera azulgrana, son dos caras de la misma moneda. Mientras que el lateral izquierdo ha renovado con el primer equipo, tras rebajar sus pretensiones salariales, el centrocampista sigue sin entrenar a las órdenes de Ronald Koeman. No solo eso sino que, tras quedar fuera del primer amistoso ante el Nàstic (en el que Balde debutó con el primer equipo), tampoco ha sido convocado para jugar el primer encuentro de pretemporada del filial.

Ilaix fue uno de los jóvenes a los que Koeman le dio la alternativa el pasado curso: disputó 18 partidos con el primer equipo, pasando por delante de Pjanic y Riqui Puig en las rotaciones del técnico azulgrana. Pero su progresión se ha visto truncada por los problemas con su renovación. El jugador, de 18 años y que acaba contrato el año que viene, no ha alargado aún su contrato. Y ante los rumores crecientes sobre el interés del Madrid y de equipos de la Premier en hacerse con sus servicios, el Barça ha decidido echarle un pulso: o renueva o no volverá a jugar. No solo con el primer equipo sino tampoco con el filial.

Ni estará a las órdenes de Sergi Barjuán este viernes en L'Escala ni tampoco a las de Koeman el sábado ante el Girona en la ciudad deportiva barcelonista.