LaLiga manifestó "su absoluta disconformidad" con la resolución del Comité de Competición de la Federación Española de Fútbol (RFEF) de no aplazar los partidos de la cuarta jornada Sevilla-Barcelona y Villarreal-Alavés y anunció que la impugnará por entender que "no es ajustada a derecho".

Para LaLiga, "dichas solicitudes han sido desestimadas al considerar, inexplicablemente, que con base al artículo 239 del Reglamento General de la RFEF, las circunstancias planteadas no se identifican como una causa de fuerza mayor, motivada por una circunstancia imprevisible como la actual que va más allá de la mera convocatoria de los jugadores en la forma establecida por la reglamentación".

"En este sentido, con dicha resolución de la RFEF (representante de FIFA en España) se está contradiciendo el planteamiento realizado por la propia FIFA para oponerse a la medida cautelar solicitada por LaLiga ante el TAS, indicando que era más fácil para LaLiga aplazar estos partidos que para FIFA aplazar los de las eliminatorias CONMEBOL", señaló.

En un comunicado LaLiga confirmó que impugnará la referida resolución de "la presidenta del Comité de Competición, dictada por delegación del Presidente de la RFEF", por considerar "que no es ajustada a derecho". "El motivo de dichas solicitudes es poder mantener la integridad de la competición como consecuencia de la extensión del período FIFA de septiembre (confederación de CONMEBOL) establecido por la Circular 1776 de 13 de agosto, fijándose la finalización de dicho período el jueves 9 de septiembre (madrugada del viernes 10 en Europa, aterrizando muchos jugadores a España el sábado por la mañana y debiendo jugar partidos horas después)", insistió la patronal.

LaLiga y los clubes Villarreal y Sevilla pidieron el aplazamiento del Villarreal-Alavés, fijado para el próximo sábado día 11 a las 18:30 horas, y el del Sevilla-Barcelona, programado el mismo día a las 21 horas, después de que el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) no estimara las medidas cautelares solicitadas por LaLiga para que los jugadores de la CONMEBOL no acudieran con sus selecciones, ante la ampliación en dos días -de 9 a 11- de las ventanas de septiembre y octubre de la FIFA para partidos internacionales.

Este jueves la presidenta del Comité de Competición, Carmen Pérez, desestimó las peticiones en base al artículo 239 del Reglamento de la RFEF que establece que "no podrá autorizarse la suspensión y aplazamiento de un encuentro a fecha que suponga alteración del orden del calendario salvo razones de fuerza mayor indubitadamente acreditadas o recogidas reglamentariamente".

El mismo artículo en su punto 3 señala que "en ningún caso podrán invocar los clubs como fuerza mayor para solicitar tal suspensión y tal aplazamiento de un encuentro la circunstancia de no poder alinear a determinados futbolistas por estar sujetos a suspensión federativa, por padecer enfermedad o lesión, o por haber sido llamados para intervenir en sus selecciones nacionales". "Sí se considerará, en cambio, como fuerza mayor, el hecho de que por circunstancias imprevisibles causen baja, simultáneamente, un número de futbolistas que reduzca la plantilla a menos de once", añade.

La FIFA aprobó en la reunión de su Consejo el pasado 17 de agosto de forma excepcional la ampliación de las ventanas internacionales de este mes y el próximo solo para las selecciones sudamericanas para compensar los partidos no jugados en marzo de este año por la pandemia.