El exciclista alemán Jan Ullrich reconoce que "hace tres años" se encontraba en una delicada situación personal y que estaba "en el mismo camino" que el italiano Marco Pantani, fallecido en 2004 por una sobredosis.
"Ya conoces mi historia, hace tres años estaba muy mal. Vinisteis a verme y yo estaba en el mismo camino que Marco Pantani, casi muerto. Y luego me recuperé y tengo buenos amigos, incluyéndote a ti, que me devolvieron la vida. Ahora estoy muy feliz", aseguró Ullrich, de 47 años, al podcast que tiene el también exciclista y exrival Lance Armstrong, con el que estuvo en Palma de Mallorca junto a otro excorredor George Hincapie y el exdirector deportivo Johan Bruyneel.
El germano confesó que "el ciclismo es bueno" para ayudar a una persona a salir de malas situaciones y que le ayudó a "salir con amigos". Y también el "amor" y su "familia". "Había olvidado todo eso, ese era mi problema", apuntó.
"Dejé el alcohol y de consumir drogas hace tres años. Ahora vivo de una forma muy saludable, mi novia cocina muy saludable para mí. Esto me puso en buena forma y me hizo sentirme bien", remarcó Ullrich. "Llevo tres años durmiendo y necesitaba tiempo para mí. Pero ahora mi cerebro está despejado, mi cuerpo está en forma, tengo algunas ideas y puedo contar más la próxima vez", añadió en el podcast recogido por 'cyclingnews.com'.
En otoño de 2018, el exciclista alemán anunció en un comunicado que tenía problemas con las drogas y admitió que se había sometido a tratamiento. Unas semanas antes, había sido detenido tras una discusión en Mallorca con su entonces vecino, el actor y director alemán Til Schweiger. Ullrich formó parte del llamado podio del EPO de París, en el Tour de 1998, junto a Pantani y Bobby Jullich. Los tres primeros estaban dopados con EPO, lo mismo que otros corredores de esa edición, según las conclusiones a las que llegó en 2013 la comisión de investigación del Senado francés.
Sobre la muerte de su colega Pantani se ha investigado si fue un homicidio, en lugar de suicidio. La investigación judicial realizada al respecto en Italia desveló que Pantani fue víctima de la Camorra, que alteró su hematocrito en el Giro de 1999 para perjudicarle.
A raíz del golpe que supuso aquel positivo y la consiguiente expulsión de la carrera ciclista, Marco Pantani iniciaría un descenso a los infiernos del que ya no se recuperaría y falleció cinco años después. Sobre su ocaso planea también la historia de un fraude de apuestas deportivas gestionadas por la mafia.
