Paula Badosa, número 7 del ránking WTA, ganó este lunes el derbi español contra Sara Sorribes Tormo (n.36) por 7-6(4) y 6-1 y avanzó a los octavos de final del torneo de Indian Wells, en el que defiende la corona conquistada el año pasado.

Badosa selló su billete para los octavos de final en dos horas exactas y seguirá peleando para defender su título en el desierto californiano, una hazaña que solo logró Martina Navratilova (1991) en la historia del torneo.

La vigente campeona, que tenía un balance de 3-2 en los precedentes con su rival de este lunes, y había ganado el último, en 2020 en Estambul, se sobrepuso a una Sorribes que nunca había llegado tan lejos en el torneo californiano.

Badosa, nacida en Manhattan en 1997, pero crecida en España, se llevó un encuentro tenso, igualado y marcado por la irregularidad con el saque de ambas jugadoras en el primer set, antes de que la vigente campeona encontrara su ritmo.

Hubo seis roturas en los seis primeros juegos del encuentro, algo inusual sobre todo para una Badosa que llegaba a este partido como segunda jugadora de la temporada con más saques ganadores (83 antes de la cita con Sorribes), detrás de la estadounidense Madison Keys, que ya superó los cien.

Badosa fue la primera en romper la "maldición", pero Sorribes respondió con carácter y, tras anular tres bolas de rotura y de set con el 5-6 adverso, forzó el desempate.

Fue en ese momento cuando Badosa impuso su juego. Tomó el mando desde el comienzo y ganó el primer set con un 7-4, al celebrar el punto decisivo con rabia, indicándose la cabeza para destacar la fuerza mental que demostró.

Es un aspecto en el que Badosa insistió mucho en el último año y que le ha permitido dar un salto de calidad en su carrera, según reconoció ella misma en rueda de prensa tras su primer triunfo en el presente torneo.

Fue una inyección de confianza para la campeona y un golpe psicológico para Sorribes, quien entregó su saque nada más empezar el segundo set y naufragó ante el tenis cada vez más brillante de su rival.

Badosa selló dos roturas consecutivas y sentenció el partido con un 6-1 en 38 minutos para avanzar a los octavos de final, en los que se verá las caras con una entre la canadiense Leylah Fernandes (m.21) y la estadounidense Shelby Roger (n.49).