El Gran Premio de Arabia Saudí, segunda cita del Mundial de Fórmula 1, seguirá con su programa este fin de semana después de un viernes largo de reuniones por los atentados a pocos kilómetros del circuito, el día de los entrenamientos libres que dominó Charles Leclerc (Ferrari).

Después de que el monegasco cerrara en lo más alto la segunda tanda, los actores de la F1 estuvieron reunidos en distintos encuentros durante más de cuatro horas con la posibilidad de suspender el Gran Premio sobre la mesa.

Los insurgentes huthis de Yemen lanzaron este viernes una decena de ataques con misiles y aviones no tripulados contra instalaciones de la petrolera estatal saudí Aramco en el interior del país, a diez kilómetros del circuito de Fórmula 1.

El Mundial siguió adelante con su primer día en Arabia Saudí pero la preocupación quedó latente ya después de la primera tanda de libres, cuando el presidente de la F1, Stefano Domenicali, en contacto con las autoridades locales, tuvo una reunión con los pilotos.

Por la noche, la preocupación por la seguridad del Gran Premio se extendió hasta la madrugada, cuando terminaron los encuentros de directores de equipos, pilotos y la F1. El presidente de la FIA, Mohammed Ben Sulayem, también garantizó la seguridad con lo que la segunda cita del Mundial sigue adelante.