El nombre de Elvira Urquijo está inexorablemente unido a la fotografía y al de la Agencia Efe, empresa donde ha desarrollado la mayor parte de su extensa carrera profesional. Este último verano otro evento de primerísima línea, en este caso deportivo, se ha sumado a un currículo en el que ya figuran acontecimientos de todo tipo, tanto a nivel regional como nacional e internacional.
Se trata de los Juegos Olímpicos en Brasil. La grancanaria se convirtió así en la primera mujer española -y la única de los quince fotógrafos de Efe que fueron a Río- de la agencia nacional de noticias que cubría la gran cita del deporte mundial desde detrás del objetivo, plasmando con su peculiar estilo informativo y artístico las plásticas imágenes que siempre depara una cita tan golosa para un periodista gráfico. Una experiencia que considera extraordinaria y dura en cuanto a esfuerzo.
En el caso de nuestra protagonista, el archipopular refrán de casta le viene al galgo se cumple. Su padre, Félix Urquijo, ha sido uno de los históricos de la profesión en las Islas Canarias, también vinculado a Efe durante gran parte de su vida laboral y a otra de las cabeceras ilustres del Archipiélago, el Eco de Canarias.
Debido al trabajo de su progenitor, la vida de Elvira Urquijo estuvo relacionada con la actividad fotográfica desde su niñez. "He tenido la fotografía en casa toda mi vida. A veces mi padre nos llevaba al trabajo a mí y a mi hermana, y en ocasiones posábamos para él. Pudimos trabajar juntos un par de años antes de que falleciera. Me influyó, pero creo que nos faltó tiempo y que pudo haberme enseñado muchas cosas más", señala.
Estudió Ciencias de la Información en la Universidad del País Vasco, en Leioa (Vizcaya). Aparte de la fotografía, tuvo la oportunidad de conocer otras facetas de la profesión. Desde el principio su carrera siempre ha estado vinculada a Efe, en donde incluso realizó las funciones de redactora algunos años.
Aún recuerda la primera foto que llevaba su firma en la Agencia. Y estaba relacionada con uno de los personajes principales de uno de los casos históricos de los sucesos en las Islas. Ángel Cabrera Batista, el Rubio, condenado por secuestrar y asesinar al empresario Eufemiano Fuentes. Esa imagen la tomó después de que éste se entregara a las autoridades en 1989 tras trece años en busca y captura.
En el tiempo que lleva desarrollando su labor en Efe ha cubierto acontecimientos de toda índole, tanto dentro como fuera de nuestro país; entre ellos, conferencias de la Unión Europea, maniobras militares de la OTAN o la boda del actual monarca Felipe VI. "A mí me toca de todo, desde una ópera hasta un partido de baloncesto", explica.
Para Elvira Urquijo, el mundo del deporte no le es desconocido; cuenta con bastante experiencia profesional cubriendo eventos de distintas disciplinas. El año pasado le propusieron viajar a Toronto con motivo de los Juegos Panamericanos, y ella aceptó encantada. Fue la primera mujer española en cubrir ese evento para Efe. Pasó un mes en la ciudad canadiense trabajando también como coordinadora y editora. Describe esa experiencia como agotadora, ya que no tuvo tiempo de disfrutar de la mayoría de reclamos turísticos de la ciudad.
Con su profesionalidad característica realizó a la perfección la tarea encomendada desde la dirección gráfica de Efe. Quizás por ello, la grancanaria fue seleccionada por la Agencia para cubrir los Juegos de Río de Janeiro. "Siempre he sido una mujer muy organizada y me gusta preparar las cosas con antelación, creo que eso ayudó a la hora de ser elegida para ir a Brasil", explica.
La fotógrafa isleña apunta que la experiencia olímpica fue similar a la vivida en Canadá, "completamente extenuante". Es cierto que tuvo la oportunidad de vivir un acontecimiento de gran majestuosidad desde dentro, pero apenas tuvo tiempo de descansar y disfrutar de los muchos atractivos que ofrece un detino como éste. Y que cubrió seis finales, la ceremonia inaugural, rugby 7, hockey sobre hierba, baloncesto, bádminton, triatlón, natación en aguas abiertas, waterpolo, taekwondo, ruedas de prensa y algunas entrevistas.
"La gente lo ve como algo muy divertido, pero no es consciente de que allí estuve trabajando desde el primer minuto, no de vacaciones. A algunos compañeros les dio tiempo de hacer más cosas, y hasta visitaron el Cristo del Corcovado. Yo sólo pude verlo desde el avión, y estuve tan ocupada que los regalos que traje de Río los compré en el aeropuerto", cuenta.
La cita brasileña la puso a prueba en cuanto a su labor profesional. Tuvo que hacer fotos de modalidades deportivas nuevas para ella. Disfrutó mucho de especialidades como el rugby, "que permite hacer fotos muy buenas porque están todo el rato pegándose". No obstante, afirma que el baloncesto fue el deporte en el que se sintió más cómoda. "En Gran Canaria cubro los partidos de este deporte casi todos los fines de semana. Muchos compañeros me pidieron consejo para hacer las fotos", explica la grancanaria.
Reconoce que le hubiera gustado cubrir disciplinas como la esgrima, "un reto para los fotógrafos pues nos vemos obligados a jugar con la cámara y buscar ángulos novedosos para no captar imágenes repetitivas". Lo que más le gustó fotografiar fueron las caras de los ganadores, ya que reflejan "mucha alegría".
Elvira Urquijo señala que en Río no tuvo dificultades para hacer las fotos ya que en ese sentido "todo estaba muy bien estudiado y cada pabellón contaba con un mánager de fotografía y un buen número de voluntarios". La periodista gráfica de la Agencia Efe comentó que, en eventos tan trascendentes como estos, también existen clases, y la organización reserva los mejores sitios para las agencias punteras a nivel mundial, como Reuters o Associated Press.
Siguiendo con la labor organizativa, Elvira Urquijo recalca que en aspectos como el transporte resultó desastrosa la cita brasileña. La periodista gráfica señala que muchas cosas estaban incompletas, y que era muy fácil perderse incluso dentro de la Villa Olímpica. Comentó también que había algunos problemas con la seguridad, y que se produjeron algunos episodios de violencia.
"Una vez alguien lanzó una piedra a una guagua llena de periodistas. Desde entonces hicimos los desplazamientos escoltados por los militares. Creo que este hecho fue más una chiquillada que un ataque propiamente dicho, y que se le dio más trascendencia que la que realmente tenía", relata la fotógrafa grancanaria.
Elvira Urquijo reconoce que le gustaría asistir a la próxima cita olímpica, los Juegos de Tokio 2020. "Es un evento muy goloso, y tengo curiosidad por ver la organización de los japoneses, sobre todo después de la de Río de Janeiro, que fue realmente terrible", apunta. No obstante, es consciente de que esa decisión no depende de ella, sino de la dirección gráfica de Efe.
Como los deportistas, su trabajo y el del resto de periodistas acreditados tuvo un premio honorífico en forma de medalla, en recuerdo de su participación. Una presea como las que aparecen en la imagen que tomó de las tres grancanarias (Astou Ndour, Leonor Rodríguez y Leticia Romero) que lograron la plata con la selección española de baloncesto femenino.
