La Provincia - Diario de Las Palmas

La Provincia - Diario de Las Palmas

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

MODA

Diseñadoraaccidental

La activista y académica afroamericana Angela Davis colabora en una línea de ropa que urge a desmantelar el sistema policial y penitenciario

(L) | LP/DLP

En el pasado 2020 en el que lo más improbable sucedía sin más, no deja de sorprender que la activista y académica afroamericana Angela Davis lanzara su propia línea de streetwear y, como ha venido celebrando el gremio de la moda, añadiera una nueva casilla —la de diseñadora— a la ya de por sí abultada hoja de servicios que implica ser un mito en activo.

Vaya por delante que la incursión de la icónica activista en el negociado de la ropa poco tiene que ver con la política cuqui a la que a menudo se agarran las firmas del lujo para cabalgar las crisis y los tiempos (información de servicio: hace dos años, Prada lanzó camisetas de 500 euros y abrigos de 1.700 con el rostro de Davis ilustrado por Trina Robbins, la primera mujer que dibujó cómics de Wonder Woman: imaginarán la hoguera que se creó en Twitter a cuenta del tributo del símbolo de la burguesía milanesa a la jefa del socialismo negro).

Hace dos años, la firma de lujo Prada lanzó camisetas de 500 euros y abrigos de 1.700 con el rostro de la pensadora

decoration

Esta vez, sin embargo, se trata de prendas de entre 35 y 75 dólares que homenajean a líderes de la negritud, como ella misma o el fundador de los Panteras Negras Huey P. Newton, a través de camisetas y sudaderas con capucha. Piezas, por cierto, de clara taquigrafía racial: tras el homicidio en 2012 del adolescente desarmado Trayvon Martin, se erigieron en símbolo de las protestas al trascender que el vigilante blanco que lo abatió había llamado al 911 diciendo que acababa de disparar a un chico que llevaba “una sudadera con capucha oscura”.

Las prendas también recogen eslóganes-picahielos del movimiento como “ya no pedimos más” y “organiza, unifica, reconstruye” o la palabra “desmantelar”, que alude a uno de los puntales del activismo negro contemporáneo: el que urge a desarmar y reconstruir el sistema policial y “el complejo industrial carcelario”, dos instituciones, según Davis, de matriz clasista y racista con las que el estado responde a problemas de emergencia habitacional, empleo y salud mental que “nada tienen que ver con la seguridad”, dijo en octubre por videoconferencia en un acto en el CCCB.

Hace dos años, la firma de lujo Prada lanzó camisetas de 500 euros y abrigos de 1.700 con el rostro de la pensadora

decoration

Toda esta digresión viene a cuento porque —además de avalar y avenirse a instagramear con los modelos de la marca de streetwear Renowned LA—la intervención de Davis ha consistido en decidir el destino de las ganancias: dos organizaciones, Underground Grit y Dream Defenders, que trabajan por la abolición y la reforma penitenciaria.

Cuenta John Dean, hombre de oros y sudaderas tras la marca, que la iniciativa nació al constatar que la causa racial y abolicionista —que en verano entró como un huracán en la conversación general tras los asesinatos de George Floyd y Breonna Taylor— ya no alienta “el mismo fervor” ni en los medios ni entre sus colegas del ramo. “Hace seis meses, el tema racial provocaba clics y solidaridad, pero ahora parece que las marcas son menos Black Lives Matter, cuando ser negro no es una tendencia: yo lo seré toda la vida”.

La activista sostiene que el Estado responde con cárcel y policía, dos instituciones de matriz clasista y racista, a los problemas sociales

decoration

Precisamente, este nervio suyo por sostener las luchas se hizo enseguida con las simpatías de Davis, a la que le bastó un encuentro por Zoom para prestarse a colaborar. “La gente asume que los momentos más importantes son cuando todo el mundo está en la calle —afirma esta activista de largo recorrido que ha levantado su pensamiento en la intersección entre la filosofía marxista y el feminismo antirracista—, pero eso solo es importante en la medida en que te dice que todas esas personas seguirán trabajando luego: necesitamos empezar a hacer cambios ahora mismo”.

Compartir el artículo

stats