Mientras la música en directo ha saltado por los aires con el covid-19, las grabaciones han seguido su curso, si bien algunas han ido encadenando atrasos. Por ello, 2021 será un año intenso en novedades, las que tocaban y las rezagadas. Pasamos revista.
ÍDOLOS POP: BILLIE EILISH Y LANA DEL REY, A PUNTO. Lanzar un álbum por sorpresa se ha convertido en tendencia de la industria en los últimos tiempos, y no adelantar la fecha de edición forma parte del marketing. En esta posición se encuentran novedades de primer orden cuya salida se espera para 2021, como las de Billie Eilish (sin título por ahora) y Lana del Rey (Chemstrails over the country club), un disco este cocinado, como el anterior, Norman fucking Rockwell, de la mano de Jack Antonoff, quien está también vinculado al nuevo de Lorde. Este es otro trabajo deseado, al que la neozelandesa no ha dado todavía los últimos toques y cuyo título está inspirado, ha dicho, en un viaje que hizo a la Antártida.
Más difuso es el horizonte de otras dos novedades que acumulan retrasos, las de Rihanna (relevo de Anti, de 2016) y Adele (cuyo 25 se remonta a 2015). Ambos álbumes eran esperados en 2020, como el de Janet Jackson (Black diamond). Otro divo pop en rampa de salida es Zayn Malik (One Direction), con su tercer álbum.
LOS CLÁSICOS: DE THE CURE A NEIL YOUG. El regreso de The Cure lleva demasiados años saltando de un año a otro, pero en septiembre Robert Smith afirmó a la BBC que los confinamientos le habían servido para terminar el álbum. Se trata del primero desde 4:13 dream (nada menos que de 2008), y Smith se ha referido a él como “el más triste” del catálogo de la formación.
Dos veteranos anuncian discos salpicados por nombres de celebridades, ambos para el 19 de marzo: Sting con Duets, combinado de citas (de Eric Clapton a Julio Iglesias), y Ringo Starr, a cargo del epé Zoom in, en cuyo tema principal, Here’s to the nights, se deja arropar por voces como las de Paul McCartney, Dave Grohl y Sheryl Crow. El ex-beatle aparece también como invitado en Macca to Mecca, el nuevo disco en directo de Little Steve (29 de enero).
Se prevé que reaparezcan Todd Rundgren (Space force), Paul Weller (Fat pop), Jackson Browne, The Doobie Brothers, Styx y Journey, y otros clásicos preparan material con vistas al pasado: Bob Dylan con 1970, triple compacto de rarezas (19 de febrero), y Neil Young, con su serie de discos de archivo (Ragged glory II, revisión expandida del correoso álbum de 1990). Y entre los decanos que se hacen de rogar, los Kinks, con su disco esperado en 2020.
PLANETA ALTERNATIVO: VUELVEN ARCADE FIRE Y ST VINCENT. Arcade Fire trabaja en un álbum concebido en buena parte en tiempo de pandemia. Cabe esperar una obra más escorada al rock que al pop, visto el tacto guitarrero de su tema de estreno, Generation A, el rol de Rick Rubin como productor y el anuncio de que el grupo apunta a su “versión más extrema”.
El rockerío está asegurado por parte de Foo Fighters con Medicine at midnight (5 de febrero), si bien decantado hacia el baile y la extroversión, apelando a las palabras de Dave Grohl. Abundante movimiento en la quinta alt-rock de los 90: de Weezer (Van Weezer, 7 de mayo) a Smashing Pumpkins (segunda parte de Mellon Collie and the infinite sadness), pasando por Garbage y los arietes punk-pop The Offspring, NOFX y Blink 182.
Confirman disco los pos-rockeros Mogwai (As the love continues, 19 de febrero) y la aventurera St. Vincent, que advierte de un “desplazamiento tectónico” en su sonido (según declaraciones a la revista musical Mojo), con el influjo del funk y el soul de la década de 1970. Confirmados están los lanzamientos de Teenage Funclub (Endless arcade) y Arab Strap (As days get dark), ambos para el 5 de marzo, así como los de Passenger (Songs for the drunk and broken hearted, 8 de enero), Sleaford Mods (Spare ribs, 15) y Tindersticks (Distractions, mayo o junio), y se cuenta con novedades de Liz Phair (Soberish), The War On Drugs, Chvrches y Waynes Blood.
HIP HOP: NO OLVIDEN QUE KANYE WEST HACE DISCOS. Hay que recordar que Kanye West, además de proveedor de titulares rampantes y de rocambolesco candidato a la presidencia de Estados Unidos, es músico, y hacia ahí apunta Donda: with child, un álbum que debería haber visto la luz el pasado julio y fue aplazado a causa de la pandemia. Cercana es la hora de esta obra dedicada a su madre, Donda West, fallecida en 2007, cuya voz se cuela en una de las canciones.
Otro lanzamiento ruidoso será el de Certified lover boy, de Drake, que se esperaba para este 1 de enero y que se ha retrasado a causa de una lesión de rodilla del cantante y rapero. Disco al que también se le atribuyen propiedades hipersensibles, presagiadas por el adelanto de la canción Laugh now, cry later. Se espera también para 2021 la nueva entrega de Kendrick Lamar, así como las nuevas obras de Travis Scott (Utopia), Cardi B y Kid Cudi (Entergalactic), y el esperado debut de esa criatura venida del futuro llamada Ashnikko (Demidevil, 19 de febrero).
METAL Y HARD-ROCK: ESPERANDO A METALLICA. El año arranca con señales de vitalidad de dos tótems germánicos. El Michael Schenker Group celebra el 50º aniversario de carrera del guitarrista (exmiembro de Scorpions y UFO) con Immortal (8 de enero), y una semana más tarde, Accept, con solo unos años menos de trayectoria, destapará Too mean to die.
En la liga de las stadium bands, cuenta atrás para Metallica, que trabaja en un álbum descrito como “el más heavy y mejor” por su batería, Lars Ulrich, en declaraciones a Classic Rock. Y para Red Hot Chili Peppers, de nuevo con John Frusciante en sus filas.
Cerrados están los lanzamientos de Alice Cooper (Detroit stories, 26 de febrero, presentado como regreso a los orígenes), Insane Clown Posse (Yum yum bedlam, 5 de marzo), Evanescence (The bitter truth, 26 de marzo) y Greta Van Fleet (The battle at garden’s gate, 16 de abril), y se esperan las novedades de Mastodon, Queens of the Stone Age, Ghost, Slipknot, Abbath, Dead Daisies (ahora con Glenn Hughes, ex-Deep Purple), Bad Company, K. K. Priest y Billy Gibbons, de ZZ Top.
