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Juana Acosta y Raúl Briones: “Las plataformas nos hacen menos nacionalistas”

'La Templanza' es una serie original de Amazon Prime Video basada en la novela homónima de María Dueñas, que cuenta con todos los ingredientes de una superproducción y con los actores Juana Acosta y Raúl Briones, como actores secundarios

(L) | PRIME VIDEO i. á.

Una actriz colombiana afincada en España, Juana Acosta, y un actor mexicano que trabaja por primera vez aquí, Raúl Briones, constituyen dos buenos ejemplos del elenco tan internacional y multirracial de la serie La Templanza. Dos intérpretes que para dar más realismo a sus personajes no han dudado en adoptar otros acentos que ayudan a conseguir ese realismo y esa musicalidad verbal buscados por la ficción.

No dan vida a los protagonistas, pero sus personajes tienen mucho peso. Háblenme de ellos.

Juana Acosta (J. A.): Carola es una mujer con una gran frustración, porque su marido siempre ha estado enamorado de otra. Vive un matrimonio infeliz. Además, no ha podido tener hijos, y eso la rompe por dentro. Por lo que persigue ser querida, cuidada... Y como no lo logra, debe buscarse la vida. Es una mujer libre, no tiene problema en ser infiel y es capaz de saltarse las reglas.

¿Es la mala de la película?

J. A. : No me gusta catalogar a los personajes de buenos o malos. Podríamos decir que es un poco la antagonista de Soledad. Es una mujer movida por el dolor. No se preocupa por el qué dirán ni por caer bien y, como necesita en su vida ciertas comodidades, hará lo que sea para no perderlas. Se mueve en el mundo de los negocios como pez en el agua. Tiene la energía de un hombre en cuerpo de mujer. Además, al no tener hijos, casi quiere a su esclava, Trinidad, como si fuera una hija.

Trinidad, el gran amor de Santos Huesos. Su personaje.

Raúl Briones (R. B.): Santos Huesos es un hombre que tiene la sabiduría del campo. Hay muchas tribus que obedecen a las leyes de la naturaleza. Su dios es el sol, el árbol, el mar... Y eso les provee de una sabiduría enorme. Es un hombre fiel, sincero y que también está en deuda con su patrón. Porque que en esa época un español le salve la vida a un mexicano es algo inédito. Por eso se convierte en un sirviente fiel. Además, no le quedaba otra. Trinidad es una esclava a ojos de la sociedad, y aparentemente Santos Huesos no, pero tiene un enganche de esclavitud. La libertad que logra en la serie es una reivindicación para todos los indios.

Usted, Juana, es colombiana. Pero interpreta a una mujer mexicana. Y tuvo que adoptar el acento.

J. A.: Un reto. Llevo 20 años en España y el acento de aquí ya lo tengo incorporado, porque tengo una hija española, con lo que trabajo en español. Pero el mexicano no lo había probado. El direc tor me dijo que si quería a Carola, la haríamos colombiana, pero conseguí al mejor coach mexicano y logré ser creíble. Ha sido un lindo trabajo. Pero muy difícil, si quieres hacer un acento bien hecho y no a brocha gorda.

R. B. : Mi acento está basado en los grupos indígenas del centro de México. En la manera en que hablan el español. Las palabras que se comen, las muletillas, las entonaciones... Y esto es uno de los grandes aciertos de la serie. Desde el principio, estaban preocupados por la musicalidad verbal. Además, querían que fuera una serie multirracial, porque así era la novela, ya que los personajes, al viajar, se encuentran con las diferentes realidades.

Juana Acosta. | PRIME VIDEO

¿Es complejo atender las exigencias de tres directores?

R. B.: Siempre hay dificultad, porque son diferentes mentes creativas. Y muy nutritivas para la creación colectiva. Admiro las discusiones que se suscitan en el set porque cada uno pone el acento en un lugar diferente. Y los actores y actrices somos los encargados de traducir sus matices.

J. A.: Yo soy muy técnica y me gusta llegar al set con el trabajo hecho. Pero no soy la dueña. Cada vez me doy más cuenta de que es el director quien sabe cuál es la tecla que hay que tocar. Desde que entendí eso vivo más tranquila y sufro menos.

¿Qué es lo más complicado de una serie de época?

R. B.: Imaginar cómo se hablaba en esa época, cómo se pensaba. Inmersos en nuestro mundo contemporáneo, estamos acostumbrados a bases en cuestión de derechos y de identidad de género que entonces eran impensables.

J.A.: Esa es una de las partes más interesantes de nuestro trabajo. Es profundizar de una manera casi antropológica, porque te debes situar sociopolíticamente en lo que estaba pasando. Yo creo que mi personaje ahora sería más fácil de entender.

¿Con la irrupción de las plataformas se tenderán más los puentes entre España y Latinoamérica?

R. B.: Sí. Las plataformas vinieron a mover las aguas en el mercado audiovisual y eso nos beneficia, porque nos vuelve menos nacionalistas.

J. A.: En Colombia, hay muchos actores de otras nacionalidades. En España no pasaba tanto, pero ahora estamos viviendo un momento muy importante en la ficción española y las grandes plataformas empiezan a ubicarse aquí. Y eso hace que vengan actores de Latinoamérica. Hasta no hace mucho yo era de las pocas latinoamericanas. Estamos creando esos puentes.

¿Les daba vértigo pensar en que la serie se vería en tantos países?

R. B.: Yo paso. Tengo respeto por el impacto, pero eso lo entiende Raúl. Ahí me preocupa Santos Huesos.

J. A.: Para mí esta no es la primera serie global. Con la primera película que rodé para Netflix en español sí recuerdo haber tenido esa sensación de vértigo. Y es maravilloso. Nos da la posibilidad de ser actores globales y eso da mucha riqueza. A nivel de televisión, Amazon está dando un paso importante no solo a nivel nacional, también internacional. Se nota en todo: en la música, el montaje, la dirección... y las actuaciones variadas con actores de tantos países, que enriquecen la serie.

R. B.: Y da realismo. Aunque no se esté contando el contexto histórico de cada país, la sola presencia de alguien que ha vivido en esos lugares ya aporta muchísimo a nivel energético y la vuelve más real.

Es de imaginar que no pudieron compaginarlo con otros trabajos.

J. A.: Yo empecé a rodar en agosto y acabé en diciembre y había muchas localizaciones, con lo que era difícil. Además, con el tiempo intento sobrecargarme menos. Porque si se me juntan muchas cosas me genera mucho estrés. Quiero disfrutar de mi trabajo. No trabajar con presión.

R. B.: Yo he estado todo este tiempo trabajando fuera de mi país , con lo que era complicado. Pero es un gran alivio poderte dedicar solo a una cosa, porque si no, se llega a un punto que vives más horas en la ficción que en la realidad. Además, es una buena forma de educar a las productoras. Si nos pagan bien podemos preparar el personaje en profundidad. Con tiempo. Y eso solo te lo da el dinero.

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