La agencia Moody's reiteró hoy que la deuda de la eurozona está aún bajo presión por la ausencia de medidas políticas decisivas tras la cumbre de Bruselas.

En un comunicado divulgado hoy, la agencia de calificación señala que espera estudiar la revisión de las calificaciones de las deudas soberanas europeas en el primer trimestre de 2012.

Como ya indicó Moody's el pasado noviembre, esto responde a una ausencia de medidas para estabilizar los mercados del crédito a corto plazo, lo que supone que la eurozona sigue siendo propensa a nuevos choques y su cohesión está bajo continua amenaza.

En su comunicado, Moody's indica que los políticos europeos anunciaron el pasado viernes medidas adicionales para responder a los "formidables desafíos" de la eurozona.

La agencia reconoce que las medidas ponen de manifiesto el deseo de los políticos de la eurozona de inclinarse hacia una coordinación fiscal centralizada.

Sin embargo, señala que ofrecen pocas medidas nuevas y muchas son similares a otras anteriores.

Moody's considera que las medidas reflejan la continua tensión entre la necesidad de aumentar el apoyo a los países con debilidad fiscal y la gran oposición para hacerlo dentro de los países más fuertes.

Las autoridades de la eurozona afrontan continuas presiones para actuar rápidamente a fin de restablecer la confianza de los mercados, pero las limitaciones también aumentan.

La agencia resalta que las medidas anunciadas no cambian el punto de vista ya expresado por Moody's de que la crisis está en un momento volátil y crítico.