En Repsol saben, por su amplia experiencia, que el proceso de extracción de petróleo frente a las costas canarias será largo. En el caso de obtener hoy mismo el permiso 1.9 -en referencia a las nueve cuadrículas que la petrolera española tiene en aguas canarias-, se estima que pasarán más de diez años hasta que se extraiga la primera gota de petróleo. Además, si como anunció el ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, no se actuará sin consenso, ayer el presidente del Cabildo de Fuerteventura, Mario Cabrera, dejó claro el rechazo frontal de la Isla al desembarco de Repsol.

Desde el momento en que Industria expida el permiso inicial para la prospección, la compañía tendrá que realizar el sondeo previo para analizar la calidad y cantidad del crudo. Si considera rentable seguir adelante, tendría que elaborar un proyecto de explotación para de nuevo elevarlo a Industria y que debe contar asimismo con el preceptivo informe de impacto ambiental.

Después de estos trámites llegaría el tiempo para levantar la explotación y construir los espacios necesarios en un puerto cercano en caso de que fuera necesario. Por lo general, en todo este proceso transcurren no menos de diez años.

Lo primero será encontrar el consenso de las administraciones canarias, que desde ayer está más lejos. El presidente del Cabildo de Fuerteventura, Mario Cabrera, mostró su rechazo frontal a la extracción por no ser una industria compatible con el turismo.

Cabrera señaló que la más cercana de las cuadrículas está "a escasos 14 kilómetros de la zona turística del Castillo", con lo que cualquier vertido que se pudiera producir llegaría a las costas majoreras "en cinco horas", según sus palabras.

Por su parte, el presidente canario, Paulino Rivero, recurrió a las palabras del ministro Soria cuando aseguró esta misma semana que no se produciría ninguna actuación sin contar con el consenso de la comunidad autónoma. "Espero que el Gobierno de España tenga tacto", expresó Rivero.

En su opinión, "este tipo de cosas hay que explicarlas muy bien y buscar el entendimiento". El entendimiento con Fuerteventura no parece que se vaya a producir a tenor de lo expresado por el presidente del Cabildo majorero y Rivero dejó claro que solo "cuando haya consenso, también con el Cabildo de Fuerteventura, hablaremos".

Mario Cabrera explicó que la actividad extractiva no duraría más de 30 años, por lo que "no se trata de recibir dinero, ya que eso sería pan para hoy y hambre para mañana".