Los ministros de Finanzas de la Unión Europea decidieron respaldar la propuesta de la Comisión Europea de sancionar a Hungría por déficit excesivo y suspender la entrega de fondos de cohesión a partir de 2013, decisión que se cancelaría si Budapest emprendiera medidas correctivas.

Según confirmaron a Efe fuentes comunitarias, se trata de la suspensión de 495 millones de euros de sus fondos de cohesión a partir del 1 de enero de 2013.javascript:cargarFckEditor('pTexto');

El Ecofin también se pronunció a favor de pedir a Hungría que haga un esfuerzo adicional del 0,5 % del PIB este año para cumplir el objetivo del 2,5 % en 2012, según las mismas fuentes.

La decisión se demoró varias horas por la insistencia de Polonia, Austria, Reino Unido, República Checa, Letonia y Bulgaria en dar más tiempo a Budapest para que corrija su desvío.

Finalmente los ministros lograron llegar a un compromiso, según el cual la situación será revisada el próximo 22 de junio y las suspensión será anulada si Hungría ha tomado las medidas necesarias para corregir el desvío.

La ministra de Finanzas de Dinamarca, Margrethe Vestager, explicó al término del encuentro que si Hungría actúa en este sentido, los demás países apoyarán la retirada de la sanción.

"Incentivo fuerte"

El comisario europeo de Asuntos Económicos, Olli Rehn, por su parte, consideró que la medida supone un "incentivo fuerte" para que Hungría adopte medidas fiscales sólidas para corregir su nivel de déficit.

Rehn aseguró asimismo que la Comisión Europea está dispuesta a proponer la cancelación de la sanción si Hungría pone en marcha acciones efectivas.

"Hungría aún tiene mucho tiempo para tomar acciones efectivas y evitar la sanción", recalcó Rehn.

El comisario afirmó, por otro lado, que las situaciones de Hungría y de otros países como España o Bélgica, también bajo procedimiento por déficit excesivo son distintas, como también lo son los plazos para actuar, ya que si Hungría tenía solo hasta 2011 y ahora hasta 2012; Bélgica tiene hasta este año y España hasta 2013.

La ministra austríaca de Finanzas, Maria Fekter, se quejó a la llegada al encuentro de hoy de que la zona euro haya actuado con más permisividad con España frente a la presión que ejerce sobre Hungría.

"A la vista de la presión ejercida sobre Hungría, sí tengo la sensación de que aquí se ha medido con doble rasero", afirmó Fekter.

Pidió que se dé hasta el verano a Budapest para decidir entonces sobre la suspensión de los fondos de cohesión y dar así un margen al Gobierno de Viktor Orbán.

La sanción propuesta por Bruselas para Hungría responde a que el país ha incumplido sistemáticamente todas las advertencias comunitarias de rebaja de su nivel de déficit desde que entró en la UE en 2004.

En 2011, el déficit húngaro se situó oficialmente en el 3,6 %, pero Bruselas considera que la cifra responde a la inclusión de elementos excepcionales en el cálculo y de medidas puntuales que esconden un déficit que habría alcanzando el 6 % el año pasado.

Esta sanción es la primera que se adopta desde que entraron en vigor las nuevas normas europeas de gobernanza económica.