El presidente del Banco Central Europeo (BCE), Mario Draghi, instó hoy a los gobiernos de países de la UE en apuros a dar prioridad al recorte de gastos por encima del aumento de impuestos para no verse golpeados por la recesión.

Draghi, en una comparecencia ante el Parlamento Europeo, criticó cómo algunos ejecutivos que "tenían mucha prisa" se javascript:cargarFckEditor('pTexto');centraron en el aumento de los impuestos y aseguró que "es lo último que se tiene que hacer" en ese tipo de situaciones.

Según el responsable del BCE, por ese motivo por ahora "no se ven ventajas de la reducción del déficit" en la economía de algunos países, aunque no citó ejemplos concretos.

Draghi mostró su confianza en que los "beneficios se vean con el tiempo" e insistió en que la prioridad debe ser "más reducción de gasto y menos tasación".

El mensaje del presidente del BCE se produce el mismo día en que el Gobierno español confirmó que subirá el IVA y rebajará los impuestos sobre el trabajo siguiendo las recomendaciones de la Comisión Europea y del resto de Estados miembros.

De Guindos dice que habrá exigencias de capital a los bancos que pidan ayuda

El ministro español de Economía y Competitividad, Luis de Guindos, señaló hoy que las entidades españolas que soliciten la ayuda europea para recapitalizarse tendrán que cumplir un ratio determinado de capital, aunque no reveló qué nivel mínimo se les exigirá.

El ministro español explicó que estas condiciones no serán "especialmente significativas" porque para "las entidades grandes españolas ya está ahí el ratio de capital", en referencia al esfuerzo de recapitalización que ya hicieron los bancos sistémicos españoles de llegar al 9 % de capital de máxima calidad que exigía la Autoridad Bancaria Europea (EBA).

El ministro explicó que las condiciones que conllevará la ayuda europea al sistema bancario español son de dos tipos: las que afectan a las entidades que reciben la inyección de capital y las genéricas.

Las primeras son similares a las que ya que ya se han impuesto a otras entidades que han requerido ayudas públicas, mientras que las segundas tienen condiciones más generales dirigidas a todo el sector financiero como la transparencia o la supervisión.