"Me dijeron que estuviera tranquila, que no iba a tener problemas con mi dinero y que lo podía recuperar cuando quisiera". Así relata Pino Guerra cómo fue la primera vez que escuchó hablar al director de su sucursal bancaria de invertir en participaciones preferentes. "Cuando me contaba lo de las preferentes yo entendí que teníamos preferencia en cobrar, así que confié y le di todo lo que teníamos para vivir tranquilos nuestra vejez", comenta.

Guerra sujeta con una de sus manos a su marido, Pablo González, que recientemente ha sufrido un ictus y una neumonía "que le ha dejado muy mal". Juntos acudieron ayer a la concentración que la Asociación de Usuarios de Bancos, Cajas y Seguros (Adicae) organizó con los afectados por las preferentes en el parque de San Telmo. En Canarias hay alrededor de 3.000 personas que han perdido sus ahorros por invertir en estos productos de alto riesgo, según Adicae.

Madre de ocho hijos y con once nietos y tres bisnietos, Guerra cuenta, con la voz algo temblorosa, cómo un día fue al banco a sacar dinero y le dijeron que no podía disponer de él. "Muchos de los miembros de mi familia están parados y yo quería ayudar dándoles un poco de mis ahorros, pero cuál fue mi sorpresa cuando me negaron sacar la cantidad que fuera", afirma. Ahora salen adelante cada mes "con la pensión que cobra mi marido".

Guerra asegura que se sienten "engañados" pero que a pesar de ser personas mayores "seguiremos luchando juntos por lo que es nuestro". A esta batalla también pertenece Victoria Mosqueda, una sevillana de 52 años que lleva afincada desde hace seis en Gran Canaria con su marido. "He estado en Suiza trabajando desde marzo y durante dos semanas me agobiaron con llamadas constantes, dos veces al día, para que cambiara mis preferentes por acciones. Solo pararon de acosarme cuando acepté", explica con indignación

Al volver a las Islas, Mosqueda comprendió que había perdido gran parte de sus inversiones, "y aunque me personé en mi banco, no me hicieron ni caso". Empleada en el sector de la hostelería, y con su marido trabajando como camionero, ahora se ha quedado "sin los ahorros de toda nuestra vida".

Desde Adicae, su portavoz, Manuel Fajardo, explica que a raíz de las 35 demandas de conciliación presentadas en primavera, han conseguido cerrar acuerdos con algunos bancos como CaixaBank. "A sus clientes se les va a devolver el dinero íntegro", afirma Fajardo. Con otras entidades, como Bankia, la asociación anuncia que va a presentar una demanda por vía civil "porque no se ha llegado a ningún acuerdo ante la petición de anular los contratos y recuperar la totalidad de los ahorros". Asimismo, en julio presentaron una demanda penal solicitando "responsabilidades por la gestión de Bankia".