La confianza del consumidor bajó 6,2 puntos en febrero en relación al mes anterior, hasta situarse en 71,5 puntos, según el Índice de Confianza del Consumidor (ICC) publicado este lunes por el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS).

Este repunte del indicador, que contrasta con la subida de 6,7 puntos experimentada en enero, es consecuencia tanto de la peor valoración que hacen los consumidores sobre la situación actual como de sus expectativas.

En concreto, el indicador de situación actual empeoró 7 puntos en febrero respecto al mes anterior, hasta los 55 puntos, mientras que el indicador de expectativas retrocedió 5,4 puntos, hasta los 88 puntos.

El descenso del indicador de situación actual se debe a la peor valoración que hacen los consumidores sobre la evolución general de la economía (-10,7 puntos) y a una percepción más negativa de las posibilidades del mercado de trabajo (-9,7 puntos). Por su parte, la valoración de la situación de los hogares se mantuvo prácticamente estable, con un retroceso de sólo siete décimas.

Asimismo, la disminución del indicador de expectativas en 5,4 puntos es consecuencia de la peor valoración de todos sus componentes: las expectativas sobre el mercado de trabajo caen 9,4 puntos, las de la situación económica general bajan 6 puntos y las de la situación de los hogares descienden un punto.

No obstante, en comparación con el dato del mismo mes del pasado año, se registran avances "muy significativos", ya que el alza de la confianza del consumidor alcanza los 20,8 puntos, con ganancias similares en términos absolutos para la valoración de la situación actual (+22,9 puntos) y de las expectativas (+18,8 puntos).

Así, en relación a febrero de 2013, la evolución continúa siendo "muy positiva", según el CIS. Así, la valoración de la situación económica del país es hoy 28,3 puntos superior, dado que las opciones que ofrece el mercado de trabajo se valoran 25,6 puntos por encima del valor de hace un año y la situación en los hogares ha mejorado en 14,9 puntos desde entonces. En porcentaje, la valoración de las posibilidades del mercado laboral aumenta un 108,5%, la de la situación económica general sube un 114,1% y la de los hogares repunta un 31,2%.

En términos interanuales, los datos de expectativas también ofrecen una evolución favorable desde febrero de 2013, con avances de 24,5 puntos, 23,3 puntos y 8,4 puntos en la situación económica del país, del empleo y de la situación de los hogares, respectivamente. En porcentaje, las expectativas respecto a la situación económica general han crecido en el último año un 39,8%, al tiempo que las referidas al empleo y a los hogares han repuntado un 35,2% y un 10,5%, respectivamente.

El ICC recoge mensualmente la valoración de la evolución reciente y las expectativas de los consumidores españoles relacionadas con la economía familiar y el empleo, con el objetivo de anticipar sus decisiones de consumo. El indicador recoge valores de entre 0 y 200, considerándose que por encima de 100 la percepción es positiva y por debajo, negativa.

Seis de cada diez piensa que ha empeorado la economía.

En general, el 60,2% de los encuestados entiende que la situación económica actual es peor que la de hace seis meses, mientras que el 25,1% no aprecia cambios y el 13,3% estima que ha mejorado.

De cara a los próximos seis meses, el 27,9% de los entrevistados confía en que el estado de la economía será mejor, frente al 41,9% que auguran un empeoramiento y el 23,4% que no espera cambios.

El ICC de febrero, para cuya elaboración se han realizado 1.400 entrevistas, muestra que al 42,7% de los entrevistados llega justo a fin de mes y que el 30,6% ahorra poco dinero cada mes. De hecho, el 14,3% afirma que ha tenido que echar mano de sus ahorros para llegar a fin de mes. Por el contrario, sólo el 2,7% dice que ahorra bastante cada mes.

Dificultades para encontrar empleo.

El 23,8% de los entrevistados afirma que ahora hay más personas en paro en su entorno que hace seis meses, y el 59,6% piensa que la situación en España para encontrar un empleo es peor que la de hace seis meses, mientras que el 28,5% cree que la situación no ha cambiado y el 8,8% que ha mejorado.

Cuando se les pregunta por la evolución del empleo de cara a los próximos seis meses, un 40,5% de los encuestados piensa que la situación empeorará, frente al 30% que cree que mejorará y el 21% que considera que permanecerá sin cambios.