El Círculo de Empresarios de Gran Canaria arremetió ayer contra la reforma fiscal que estudia el Gobierno regional. La organización tachó de "populista y demagógica" la medida anunciada esta semana por el presidente, Paulino Rivero, de volver a acometer una subida de impuestos, en este caso para las rentas superiores a los 60.000 euros.
Para la asociación encabezada por Germán Suárez, la revisión que planea el Ejecutivo tiene "nulo fundamento económico y fiscal" y representa "una amenaza" para la reactivación del consumo.
La Consejería de Economía y Hacienda, que dirige Javier González Ortiz, estudia todas las opciones para que "paguen más [al fisco] los que más tienen", tal como informó Rivero el martes en el Parlamento, donde vaticinó que "pronto" se pondría en marcha esta reforma "en el momento en que las condiciones lo permitan".
Su intervención asombró no sólo a las patronales, sino al Grupo Parlamentario Socialista y a su propio partido, Coalición Canaria, que el viernes le amonestó por no haber consultado este asunto de gran calado en el seno de la formación. Más si cabe a ocho meses de las elecciones locales y autonómicas.
El Ejecutivo hace números para ver si es posible modificar el tramo autonómico del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF). Baraja elevar los tipos impositivos en los tramos más altos, de 34.000 a 60.000 euros y, sobre todo, de 60.000 euros en adelante. Ésta es una de las opciones para "contrarrestar" la reforma fiscal del Estado, que el jueves pasó su primer examen en el Congreso.
Sin embargo, el Círculo de Empresarios destacó en un comunicado que los canarios ya están, en la actualidad, entre los que más impuestos pagan en el conjunto del Estado en casi todos los tramos. Por eso, expresan su sorpresa ante las palabras de Rivero al acusar a la reforma fiscal propuesta por el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, que "rebajó la imposición en todos los peldaños, de ser beneficiosa para las rentas altas".
"Antojo"
Según esta asociación, ahora "los que más ganan en Canarias ya son los que más pagan, por lo que se cumplen los principios de progresividad". "A no ser que estas políticas respondan a cuestiones electoralistas o traten de camuflar deficiencias en la gestión de la economía", insinuó la organización.
"Actuar con demagogia es peligroso", alertó el ex presidente del Círculo y consejero delegado de Publicidad Atlantis, Alberto Cabré, para quien "una decisión así requiere un estudio profundo de ingresos y gastos y calibrar bien cómo marcha el crecimiento económico".
"Los empresarios queremos invertir y crear empleo, y, por supuesto, ganar dinero con ello", subrayó Cabré. Matizó: "No queremos privilegios, pero ya somos los que más pagamos, tanto en el tramo estatal como en el autonómico".
Para el CEO del grupo Domingo Alonso, Oliver Alonso, "lo que tiene que hacer el Gobierno canario es ser más eficiente con sus ingresos, adecuar el tamaño de las administraciones a las necesidades y suprimir gastos superfluos".
Para refrendar su tesis, el Círculo recuerda que el IRPF en España tiene dos tramos: el estatal y el autonómico, y las comunidades pueden hacer uso de su tramo "a su antojo". Ocho comunidades (Canarias, Cataluña, Andalucía, Asturias, Cantabria, Murcia, Valencia y Extremadura) decidieron en su día imponer gravámenes incrementados para las rentas altas, haciendo uso del tramo autonómico del IRPF. Canarias unió a la subida a las rentas superiores hasta el 22,58% y, además, la eliminación de ayudas como los gastos por estudio, el traslado de residencia o la familia numerosa. "Y eso sin contar las exenciones fiscales que disfrutaban los canarios y que ahora han pasado a manos del Ejecutivo regional para gastarlo a su antojo. El coste de la insularidad es de los canarios, no de su Gobierno", resalta la nota. En consecuencia, critican sin ambages que "Canarias ya es una de las regiones en la que los contribuyentes soportan una mayor carga fiscal". Citan como ejemplo que los solteros y sin hijos que vivan en las Islas y cobren 12.000 euros al año pagan este año 675,01 euros al año de IRPF, más que un madrileño, un gallego, un riojano, un cántabro o un extremeño.
Según los cálculos del Círculo, un canario que perciba 24.000 euros brutos pagará por IRPF 3.742,70 euros al año, 115,27 euros más que un madrileño, 125,56 euros más que un cántabro, 62,78 euros más que un gallego y lo mismo que un catalán o un valenciano. Los que cobren 38.000 euros anuales pagan 7.676, frente a los 7.613,22 de un gallego o los 7.468,96 de un madrileño. Solo a partir de los 300.000 euros paga un contribuyente en el Archipiélago por debajo de la media.
La patronal apunta que no todas las autonomías actúan igual: Castilla-La Mancha fijará en 2015 la misma escala que el Estado y, además, establecerá los tipos previstos por la Administración central en 2016. Extremadura, por su parte, reducirá el IRPF, aunque está por ver si replica la estructura estatal.
El Círculo cree que la reforma fiscal de Madrid supone "un avance" en cuanto a la progresividad, juntando las nuevas tarifas del IRPF, los mínimos personales y familiares, así como la reducción prevista en los rendimientos del trabajo. El texto de Montoro "ya beneficia a las rentas más bajas", interpretan.
