Seis de los diez aeropuertos más rentables de España se encuentran en Canarias. El beneficio neto de los aeródromos del Archipiélago creció un 1.075%, al pasar de 27,29 millones de euros en 2012 a 320,53 millones el pasado año, es decir, 293,24 millones más. Cifras atractivas que engrosan las cuentas globales de AENA de cara a la captación de inversión privada. De hecho, Ferrovial, Corporación Financiera Alba y el fondo británico The Children's Investment Fund (TCI) formarán el núcleo duro del ente gestor de la red aeroportuaria nacional, al asumir un 21% del capital social, mientras que el 28% restante saldrá a Bolsa en noviembre, a través de una oferta pública de venta (OPV). Pero el proceso privatizador de AENA no será un camino de rosas. El Gobierno regional dejó claro ayer que seguirá impugnando cada paso, puesto que considera que esta operación "no se ajusta a derecho" y pone en jaque la cohesión territorial y social de esta comunidad autónoma.

Las ganancias de los aeropuertos isleños se multiplicaron el pasado año debido a varios factores. Entre otros, el esfuerzo por ahorrar costes, la subida de tasas aéreas y la positiva evolución en el tráfico de pasajeros, aupado por el tirón turístico. Las ocho infraestructuras registraron en 2013 un total de 32.555.764 pasajeros, de los que 21,1 millones fueron extranjeros, 883.622 viajeros más respecto a 2012.

El último informe de AENA coloca a Barcelona-El Prat en lo más alto del ranking de beneficios (168,27 millones) en 2013, seguido por Palma de Mallorca (97,61 millones) y el de Adolfo Suárez-Barajas (84,7). El estudio desvela que el aeropuerto de Gran Canaria se anotó 81,42 millones de euros en su cuenta de resultados de ese año después de impuestos, un 189,54% más que el ejercicio anterior (28,12%). A continuación se encuentra Tenerife Sur, que obtuvo 79,65 millones de euros de ganancias, un 185,38% más. Fuerteventura sumó 51,13 millones de euros en este apartado; Lanzarote logró 48,9 millones; mientras que La Palma y Tenerife Norte abandonaron los números rojos para cosechar 48,9 millones y 26,78 millones de beneficios, respectivamente. En el lado opuesto, la instalación de La Gomera presentó 1,27 millones de euros en pérdidas, cuantía que en El Hierro se elevó a1,54 millones.

No obstante, la mejora de resultados en los aeropuertos del Archipiélago se debe fundamentalmente al incremento de ingresos por servicios aeroportuarios debido a la "adecuación" de las tasas y al crecimiento del tráfico aéreo, según fuentes de AENA, que destacaron también el alza de los ingresos comerciales, a raíz de la ampliación de la oferta y la renegociación de contratos de servicios.

A lo que se añade un programa de contención del gasto, que incluyó un plan social de desvinculaciones voluntarias, que afectó a 1.600 empleados en España; así como la liberalización de las torres de control de Lanzarote, Fuerteventura y La Palma, adjudicadas a Saerco.

Igualmente, las fuentes vinculan los buenos datos de las Islas con que el Impuesto de Sociedades fue positivo. Había deducciones por inversiones pendientes de aplicar y al aplicarse originó las cifras de resultados en los aeropuertos isleños.

Respecto a su privatización, AENA colocará entre inversores privados un 49% de su capital, maniobra con la que el Estado espera ingresar 2.500 millones de euros. El Gobierno central conservará el otro 51%, lo que, según el Ministerio de Fomento, le permitirá mantener el control de los 46 aeropuertos y dos helipuertos españoles.

Oposición

Enaire, propietario de las acciones de AENA, precisa que los nuevos accionistas del "núcleo estable" de la entidad, con una participación conjunta del 21%, son la familia March, a través de su rama inversora Corporación Financiera Alba, con un 8% del capital (12 millones de acciones); mientras que Faerco, del Grupo Ferrovial -compañía de construcción y servicios presidida por Rafael del Pino-, y el fondo británico asociado a la organización benéfica The Children's Investment Fund se harán con un 6,5%, 9.750.000 títulos cada uno.

Por su parte, el Gobierno canario advierte de que mantendrá su "frontal" oposición a la privatización de AENA "con todos los recursos a su alcance". El consejero de Transportes, Domingo Berriel, avisa de que el procedimiento llevado a cabo "no se ajusta a la legalidad", puesto que el Estatuto de Autonomía de Canarias establece que la gestión de los aeropuertos de interés general es "una competencia ejecutiva" de la comunidad autónoma, siempre que el Estado no se reserve su gestión directa.

El Ejecutivo regional insiste en reclamar las competencias de los aeropuertos de las Islas, al temer que su privatización puede desembocar en la enajenación o cierre de cualquier instalación o servicio que no sea rentable. De momento, la Comisión Nacional del Mercado de Valores recoge ya en el folleto informativo de la Oferta Pública de Venta la intención del Gobierno autonómico de impugnar todo el trámite privatizador y acudir a los tribunales.