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"Es imposible ser la aldeíta de Astérix mientras el mundo avanza en otra línea"

"En 2015 se instalaron 51.000 megavatios de potencia fotovoltaica en el mundo y solo el 0,09% en España", manifiesta José Donoso, director general de la Unef

El director general de la Unef, José Donoso. SABRINA CEBALLOS

Con lo difícil que es poner de acuerdo a los partidos, ha logrado que todos, excepto el PP, convengan en la necesidad de derogar el decreto de autoconsumo. ¿Tan malo es?

Si tienes de tu parte el sentido común, es fácil poner de acuerdo a extremos tan opuestos como Ciudadanos y Bildu. Lo que no tiene razón de ser es el decreto. Nadie comprende por qué puede comprar una lavadora que gasta menos y no pasa nada, pero coloca una instalación fotovoltaica, que también ahorra, y le hacen pagar por ello. Menos aún se puede entender que en un momento como el actual, en el que todos los días estamos hablando del cambio climático y de la necesidad de rebajar las importaciones de petróleo, se pongan barreras a una energía limpia que favorece la lucha contra el cambio climático, ayuda a la descarbonización y a incrementar la independencia energética de nuestro país. Además, no se están pidiendo primas ni subvenciones, solo que no se penalice.

Se elimina el actual decreto, ¿y qué norma se coloca en su lugar?

El acuerdo al que han dado su visto bueno los partidos pasa por eliminar el impuesto al sol y regular la retribución del excedente de energía que vierten a la red los autoconsumidores. Ahora mismo, a los pequeños productores la ley les obliga a regalarlo.

¿A quién?

A las compañías eléctricas, y eso no tiene mucho sentido, pero hay más detalles en esta norma alternativa que manejamos. Por ejemplo, incluye una tramitación administrativa simplificada, porque tampoco es lógico que a una pequeña instalación que no va a verter nunca a la red, se le exija un estudio como si fuera a dedicarse precisamente a enviar toda la energía hacia fuera; eso es tiempo y dinero, la tramitación deber ser simplificada y razonable.

¿Se han acordado del autoconsumo asociado a la desalación de agua para la agricultura?

También nuestra alternativa busca resolver este problema que se ha generado en Canarias. ¿Cómo puede entenderse que quien haya instalado aerogeneradores para desalar el agua con el que riega tenga ahora que desconectar esa potencia eólica para consumir energía proveniente del fuel, sucia, cara y que se importa? Es absurdo. Y le añado otro: el autoconsumo colectivo. Un ciudadano puede tener una caldera de calefacción común en un edificio pero no una instalación fotovoltaica que suministre energía eléctrica.

Lo mencionó hace un momento, pero el ministro José Manuel Soria asegura no saber qué es el impuesto al sol. ¿Usted sí?

Es una forma coloquial de denominar a las cargas y peajes impuestos a los autoproductores. Si se coloca una instalación que ahorra energía, hay que pagar las mismas cargas que si se estuviera consumiendo en lugar de ahorrando. Lo aplicamos solo a la energía autoconsumida. Si llega el caso de verter a la red porque sobra, estamos de acuerdo en que hay que pagar, estaríamos utilizando la red.

Habla de retos de la energía fotovoltaica. ¿Es que hay futuro?

Lo hay. Confiamos en que el acuerdo con los partidos, que suman 227 diputados, mayoría absoluta, se implemente lo antes posible. El sector está en pleno apogeo mundial y bate récords. El año pasado se instalaron 51.000 megavatios en todo el mundo.

¿Y en España?

Tan solo 49, el 0,09%.

Poco.

Muy poco. Para que se haga una idea, solo en la lluviosa Bruselas y su zona de influencia se instalaron 51 megavatios, más que en toda la soleada España; otro sinsentido. Tenemos tecnología, empresas competentes, sol, lo único que nos frena son las barreras regulatorias.

¿En Canarias más tenues?

Sí, se hizo una excepción y no se aplica el impuesto al sol. Hay margen para empezar a desarrollar la fotovoltaica ya.

¿Cuánto daño han ocasionado los cambios regulatorios de los últimos cuatro años?

Muchísimo.

En dinero.

Si hablamos de los cambios con carácter retroactivo, el importe está en el entorno de los 1.000 millones de euros, pero hay que sumar otros daños. Hace cinco años trabajaban en este sector en España 40.000 personas; hoy, solo 5.000. Esa pérdida de capacidad industrial, de potencial, de empleo, todo ese autoconsumo que se podría haber generado, las empresas y filiales de multinacionales que han cerrado... ¿cómo podemos valorarlo?

¿Se ha producido una huida de inversores?

Quien pudo vendió su instalación. Han aparecido nuevos fondos de inversión, con capacidad financiera, buscando proyectos en situación de estrés, que dicen ellos.

¿Esa fue la política seguida por todos, independientemente del tamaño?

No, los pequeños directamente no son gestionables y no han tenido la posibilidad de vender y ahora van a tener que trabajar toda su vida sólo para pagar el préstamo al banco.

¿Se han frustrado proyectos que estaban en marcha?

Proyectos y empresas. Las que han sobrevivido ha sido a base de internacionalización, se han tenido que ir a trabajar fuera y lo mismo ha ocurrido con los técnicos. Fuimos un país pionero y nuestros expertos se han tenido que expatriar para poder trabajar.

Se declara optimista pero no oculta que el marco regulatorio es sombrío. ¿Cómo se conjuga?

Si pensáramos que vamos a tener cuatro años más de lo mismo en política energética, no quedaría otra salida que ser pesimistas, pero, y vuelvo al principio, el sentido y el interés común se van a imponer, con lo que podremos desarrollar todo lo que tenemos entre manos. Es imposible ser la aldeíta de Astérix, en sentido negativo, mientras el mundo avanza en otra línea. Hay una auténtica revolución en los tejados a partir del autoconsumo, el balance neto, la generación distribuida y las redes y ciudades inteligentes.

¿Llegaremos a tiempo de tomar este tren o estamos definitivamente descolgados?

No podemos quedarnos al margen. Quienes se han estado oponiendo sólo nos han hecho perder cuatro años, pero las cosas son imparables. Hay una frase de Víctor Hugo a la que me siempre me gusta recurrir: "Cuando a una idea le llega su momento en la historia, no hay ejército que la pueda parar". Estamos en ese momento.

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