La matriarca de la empresa de alimentación canaria Emicela, María Araceli Hernández Arencibia, ha fallecido. El Tanatorio San Miguel de la capital grancanaria acoge el velatorio.

La unión de su apelativo, Cela, con las primeras letras del nombre de su marido, Emiliano Arencibia Rivero, originó la marca comercial Emicela en 1963, cuando la compañía comenzó la actividad de tostado y comercialización de café. Emiliano Arencibia, cambuyonero en el puerto de La Luz y de Las Palmas, poseía un puesto en el Mercado Central de la capital grancanaria desde finales de los años 50 del pasado siglo.

Actualmente, los cuatro hijos del fundador, Emiliano, Sergio Araceli y Marianela, se sientan en el consejo de administración de Emicela. Premio a la Excelencia Empresarial del Gobierno de Canarias en 2013, la compañía emplea a casi 300 personas en tres continentes, ya que cuenta con clientes en más de 35 países.