El consejero delegado de BBVA, Carlos Torres, avanzó ayer que la entidad prevé cerrar cien oficinas y un ajuste de plantilla en unos 500 empleados al cierre de este año en España, que se sumarían al ajuste por la integración de Catalunya Banc (CX), la antigua Catalunya Caixa. De esta forma, el banco prevé un total de 2.000 salidas al término de este ejercicio.

Torres calificó de "éxito" la integración de Catalunya Banc (CX), que el banco completó en septiembre tras cerrar 436 oficinas y un ajuste de plantilla de 1.556 trabajadores relacionadas con dicho proceso.

Dentro del esfuerzo "continuo" de BBVA por controlar los costes, el consejero delegado del banco explicó que las salidas adicionales al ERE de CX se deben a la "gestión ordinaria" y que estas se articularán sobre todo vía prejubilaciones. Para ello, BBVA ha dotado 53 millones de euros en provisiones por costes asociados a este ajuste de trabajadores y a la reestructuración, que afectará a personal relacionado con la actividad bancaria en España. Torres aclaró que estos ajustes de plantilla se realizarán sin implementar un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) y señaló que BBVA cerrará este año con una red de 3.305 oficinas.

"Es un esfuerzo continuado en España y en todas las geografías", afirmó Torres en la rueda de prensa para presentar los resultados. De hecho, anticipó más "medidas" y "salidas adicionales" en la división en España para 2017, si bien no concretó una cifra. "El control de costes es una prioridad y seguirá siendo", enfatizó, al tiempo que definió esta estrategia como una "filosofía" para ganar en eficiencia. "Una filosofía que no para nunca", agregó.

Beneficios

BBVA obtuvo un beneficio neto atribuido de 2.797 millones de euros entre enero y septiembre, un 64,3% más que un año antes, debido al impacto de varias operaciones corporativas y al efecto de la fluctuación de las divisas, sin los que el crecimiento hubiera sido del 15%.

En una nota remitida a la CNMV, la entidad explica que las citadas operaciones incluyen el cambio de perímetro tras la incorporación de Catalunya Banc y la compra del 14,89 % adicional en el banco turco Garanti, que se incorporó a las cuentas el tercer trimestre del año pasado.

Además, el banco destacó que, aunque sigue siendo relevante, el impacto de la depreciación de los tipos de cambio se ha suavizado en el tercer trimestre, un periodo en que el beneficio neto estanco alcanzó los 965 millones.

Torres considera que "ha sido un buen trimestre, con un crecimiento sólido en los ingresos recurrentes, control de gastos y estabilidad de los indicadores de riesgo", y añadió que la entidad ha logrado ya el objetivo de capital marcado para 2017.