Veremos más fusiones entre entidades bancarias, "ese camino no está agotado". Así lo afirmó ayer Luis María Linde durante el turno de preguntas posterior a su intervención en el Foro LA PROVINCIA. Además, el gobernador del Banco de España abogó por estimular las operaciones corporativas de esta naturaleza entre entidades de distintos países de la Unión Europea (UE) y mostró su extrañeza por que todavía no se haya producido ninguna.

Linde señaló que aún hay margen para incrementar la eficiencia del sector bancario. La escasa rentabilidad que ofrece en la actualidad el negocio financiero, por los históricos tipos bajos, anima a ello. A juicio del máximo dirigente del regulador español, todavía se producirán cierres de oficinas y recortes en las plantillas de algunas entidades, porque, según le apuntaron desde el público y reconoció, España es el país con mayor número de sucursales bancarias por habitante.

Estimular las uniones

A estas alturas, "tras llevar a buen término la unión monetaria y haber concretado en parte la bancaria", el gobernador del Banco de España no encuentra explicación a la inexistencia de fusiones entre entidades "de jurisdicciones distintas" de la UE. "Eso indica que algo no funciona" y "habrá que adoptar medidas para estimularlo, porque serían lógicas", explicó Linde.

En torno al rescate bancario, el protagonista del Foro LA PROVINCIA reconoció no estar convencido de que la totalidad de los 51.303 millones de euros que desde 2009 inyectó el Banco de España en el sistema financiero retornen a las arcas públicas o, lo que es lo mismo, al bolsillo de todos los españoles. "El Estado no tiene intención de ser banquero", enfatizó para asegurar que la participación en Bankia y Banco Mare Nostrum se venderá, "evidentemente". Además, como él mismo recordó, obliga a ello el Memorándum de Entendimiento (MoU, por sus siglas en inglés) suscrito por el Gobierno de España con Bruselas en el año 2012. "Se va a recuperar una parte sustancial, pero no sé cuánto", reconoció.

Con todo, Luis María Linde estimó que el sector financiero ha aprendido la lección de la crisis y le instó a ser "rentable y mantener su función" principal de vehiculizar el ahorro hacia la inversión y financiar a empresas y familias. La cuestión no es sencilla porque, como detalló, ahora debe captar recursos en un escenario de mayor presión regulatoria y, sobre todo, atendiendo a principios de "comercialización adecuada" o, lo que es lo mismo, alejado de desmanes como la colocación de participaciones preferentes entre la clientela para incrementar su nivel de capitalización.

En torno a las cooperativas de crédito -Cajasiete, uno de los patrocinadores de ayer lo es- destacó la "acreditada salud financiera" de la que, en general, gozan. También destacó, Luis María Linde, el buen comportamiento que han mostrado este tipo de entidades, "no sin dificultades, pero sin necesidad de ayudas", durante la crisis.

Otro de los asuntos abordados por el gobernador del Banco de España fue el de la dificultad por la que atraviesa el sistema de pensiones. A pesar del adelgazamiento del fondo de reserva y reconocer la existencia del problema, huyó de alarmismos y se mostró seguro de que existen "instrumentos para hacerlo sostenible". Eso sí, como reseñó, "será necesario discutir" sobre las soluciones, dado que el actual Gobierno central no cuenta con mayoría absoluta. Al respecto, emplazó a la reunión del Pacto de Toledo, en la que "habrá acuerdo", estimó.

La política monetaria, "laxa", que sigue el Banco Central Europeo (BCE) ocupó también parte de su discurso. En su opinión, el presidente del organismo regulador, Mario Draghi, ha llevado "muy lejos" esta estrategia que ha permitido "abaratar la financiación" y conseguir homogeneizar el coste de esta en la UE. "En lo peor de la crisis, las pymes españolas pagaban tipos más altos que las alemanas y las francesas", expuso Linde.

En cuanto a si Fráncfort (sede del BCE) mantendrá en el corto plazo la compra masiva de bonos de los países que mayores problemas mostraron para mantenerse a salvo de las maniobras especulativas de los mercados -España entre ellos-, Luis María Linde señaló que la clave radica en que la retirada de " la respiración asistida" se produzca de manera gradual.

Sobre el endeudamiento que ha alcanzado España -superior al 100% del PIB- explicó que la evolución no es muy distinta de la de otros países y la achacó "a cambios de las condiciones sociales y políticas". No obstante, manifestó su convencimiento de la necesidad de "corregir" esta deriva y recordó que en 2006 España era "el país más virtuoso, junto a Finlandia", en este capítulo, con una deuda de solo el 36% de su PIB.