El Observatorio de la Energía de Canarias ya está en marcha, "un punto de encuentro en el que se reúnen la administración, los empresarios y quien quiera aportar para la consecución de un mix energético más sostenible", tal y como lo definió el consejero de Economía, Industria, Comercio y Conocimiento del Gobierno de Canarias, Pedro Ortega.

El impulso a la penetración de las energías limpias tiene un objetivo: el 45% de la demanda eléctrica del Archipiélago deben cubrirlo las fuentes de generación renovables en 2025. Por el camino, la reducción de emisiones de dióxido de carbono (CO2) a la atmósfera se recortará un 30%. El observatorio servirá también para introducir correcciones sobre la marcha en el proceso de implantación de estas tecnologías.

"Partimos del 8% en 2015", aludió el consejero en referencia a la fecha de la toma de posesión de su cargo. Ortega situó el primer hito a la finalización del año próximo, cuando deben estar operativos los parques eólicos del cupo de 450 megavatios que el Gobierno central autorizó a Canarias. Sus cálculos sitúan para entonces en un 21% la presencia del sol y el viento como fuentes energéticas en las Islas.

Para llegar a esos números, el Archipiélago contará además con la nueva subasta, de alrededor de 250 megavatios de potencia, anunciada el pasado viernes tras el encuentro que Ejecutivo regional y organizaciones empresariales del sector mantuvieron con el secretario de Estado de Energía, Daniel Navia.

Precisamente el observatorio creado ayer también servirá como herramienta para fijar posición en el diálogo con el Gobierno central. Aunque en la actualidad es fluido, merced a la buenas relaciones entre Coalición Canaria y Partido Popular, es cierto que en ocasiones cuesta hacer entender la necesidad de un trato diferencial con las Islas.

La comunidad autónoma tiene una dependencia de los combustibles fósiles mucho más elevada que la Península, donde operan otras tecnologías que abaratan el coste final, tales como la nuclear o los grandes saltos de agua. Por ello, la generación con energías renovables abarata el precio de los megavatios hora en las Islas muy por encima de como lo hace en el resto del Estado.

En ocasiones, cuando el precio del petróleo en los mercados de futuros ha sido muy elevado, la producción de los aerogeneradores ha llegado a ser de un solo un tercio de la aportada por las centrales que necesitan quemar combustible. Eso sin contar el impacto medioambiental de unos y otras.

La evolución de los proyectos y los avances tecnológicos son otros factores que vendrán en auxilio del Gobierno canario para la consecución de los objetivos que se ha marcado. Infraestructura de almacenamiento energético como la central de Chira-Soria o "el proyecto de La Graciosa", apuntó Ortega, para abastecer la demanda con un sistema de microrredes de generación" y pilas de acumulación, permitirán una mayor penetración de las energías limpias.

"En Canarias hay diferentes proyectos de laboratorio en marcha", señaló el consejero. El observatorio también servirá de impulso al estudio de nuevas tecnologías que permitan la integración de energías limpias en el mix energético del Archipiélago.