El presidente de la patronal CEOE, Juan Rosell, abrió ayer la puerta a que el acuerdo salarial con los sindicatos para 2017 recoja subidas más allá del 2,5 % para los salarios más bajos. "Podríamos hablarlo", señaló tras reconocer que "es muy difícil" poder llegar a fin de mes con un sueldo de 800 euros.

"Quizá ha llegado el momento de los acuerdos con los sindicatos de hacer planteamientos distintos para los salarios muy bajos y los no tan bajos", dijo Rosell tras reconocer que los sindicatos UGT y CCOO y las patronales CEOE y Cepyme llevan meses sin lograr cerrar un pacto salarial para 2017 que sirva de guía para las negociaciones de convenios colectivos.

La propuesta de la patronal, que mejoró su oferta inicial, pasa por subidas de entre el 1 % y el 2 %, con medio punto más adicional en función del sector, mientras que los sindicatos exigen un alza de entre el 1,8 % y el 3 %.

La respuesta de Rosell vino determinada por el apremio de la ministra de Empleo y Seguridad Social, Fátima Báñez, el día anterior a los empresarios para que la mejora de la economía y el empleo se traslade a los salarios. También el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, hizo el lunes hincapié en que un acuerdo en salarios "es capital" para la recuperación económica.

En la clausura ayer de la asamblea electoral de la Confederación Española de la Pequeña y Mediana Empresa (Cepyme) Báñez les urgió de nuevo que "intensifiquen" el diálogo a fin de cerrar el acuerdo salarial de negociación colectiva para 2017 antes de que finalice el mes de julio. La titular de Empleo recalcó que la subida salarial es "compatible" con que cada día haya más empresas competitivas y con que se cree medio millón de puestos de trabajo al año. "La recuperación tiene que llegar a todos", subrayó.