Primero fue la presidenta de la Reserva Federal (Fed), Janet Yellen, advirtiendo del peligro de relajar la regulación y después, su homólogo en el Banco Central Europeo (BCE), Mario Draghi, haciendo lo mismo en torno al "riesgo serio" que supondría para "el crecimiento de la productividad" sucumbir a tentaciones proteccionistas. Sin nombrarlo, ambos coincidieron en la conferencia de Jackson Hole (Wyoming, EEUU) en señalar el rumbo errático de las políticas económicas que pretende implementar el presidente estadounidense, Donald Trump.

Draghi defendió los mercados abiertos y entidades como la Organización Mundial del Comercio. Eso sí, obvió cualquier referencia explícita al tipo de cambio del euro y reconoció que EEUU lleva ventaja a Europa y Japón en la recuperación. "Nuestras discusiones se centran ahora no sólo en cómo estabilizar la economía, sino en cómo hacerla más dinámica, mejorando el bienestar de la población", añadió Draghi en el encuentro de responsables de bancos centrales. En este sentido consideró que "uno de los ingredientes clave para incrementar la productividad es la apertura".

El riesgo de proteccionismo es "particularmente agudo a la luz de los cambios estructurales que afrontan las economías avanzadas", según el presidente del BCE. Además, expresó su inquietud por el envejecimiento incidiendo en que en 2025 habrá 35 personas de 65 o más años por cada cien en edad de trabajar en los países de la OCDE, en comparación con los 14 de 1950.

Por su parte, Yellen, aseguró que el sistema financiero de EEUU es "sustancialmente más seguro" por el fortalecimiento de la regulación, y advirtió sobre el riesgo de olvidar "la lección" de la crisis. "Gracias a las reformas que fortalecieron nuestro sistema financiero, y con apoyo de la política monetaria y otras medidas, el crédito está disponible en buenas condiciones, y los préstamos han avanzado en líneas generales con la actividad económica reciente, contribuyendo a la fuerte economía de hoy", explicó.

La presidenta de la Fed subrayó que si se mantiene "esta lección" en la memoria y se actúa de acuerdo, hay "razones para creer que el sistema financiero experimentará menos crisis". Gracias a ello, precisó, el sistema financiero es ahora "sustancialmente más seguro". Este mensaje para Trump es extensivo para consejeros delegados de Wall Street como Jamie Dimon, de JP Morgan, quienes han insistido en que el exceso de regulación aplicada por el Gobierno federal sobre el sistema financiero tras la crisis está frenando la expansión económica y crediticia.