Primera toma de contacto del consejero de Turismo, Cultura y Deportes del Gobierno de Canarias, Isaac Castellano, con las patronales turísticas del Archipiélago. En ella, "la imagen" que transmite a la sociedad la principal actividad de la economía del Archipiélago fue uno de los asuntos principales. La turismofobia no ha hecho hasta el momento presa en las Islas y, tanto Castellano como los empresarios quieren que continúe siendo de este modo.
El integrante del Ejecutivo de Fernando Clavijo desea que los beneficios que aporta la actividad alojativa se extiendan por cuantas más áreas de la economía canaria mejor. A cambio, los empresarios expresaron la necesidad de que la Administración, en palabras del presidente de la Federación de Empresarios de Hostelería y Turismo (FEHT), José María Mañaricua, "dignifique" el trabajo que ellos realizan, es decir, que les defienda cuando en la opinión pública se instalan mensajes "falsos".
Por ejemplo, cuando se asegura que no crean empleo. "No es cierto. De hecho, la situación sería muy diferente si no contáramos con este sector", expresó el consejero regional. En esa misma línea, Mañaricua explicó que si hay algún culpable del desempleo, "desde luego no es el turismo". Al respecto, recalcó que los empresarios canarios del sector alojativo mantienen en situación de alta en la Seguridad Social a más trabajadores de los que existen en este ámbito en Baleares, "la primera comunidad autónoma que logra colocar su tasa de paro por debajo del 10%".
El presidente de la FEHT señaló así que para alcanzar el 9,25% revelado por la Encuesta de Población Activa (EPA) correspondiente al tercer trimestre de este año el otro archipiélago español ha visto cómo otras actividades empresariales se sumaban a la creación de empleo. "Se nos ha demonizado y necesitamos que se nos defienda", explicó Mañaricua.
También en la discusión abierta sobre la calidad del empleo que se genera, fuera de toda duda para el presidente de la patronal turística porque "el convenio" por el que se rigen las relaciones laborales "es mejor" que el de otros segmentos del ámbito de los servicios como "el comercio". En este punto, sin embargo, Isaac Castellano reconoció que el documento marco no es idéntico para ambas provincias, lo que puede generar diferencias. En cualquier caso, se mostró como un firme defensor de "lo mucho" que el negocio turístico "aporta a la sociedad canaria".
Sobre la mesa también estuvo la remodelación del decreto que regula el alquiler vacacional. "Tenemos que escuchar a todas la partes", expuso el consejero, que, además, avanzó que una vez se hayan recogido todas las opiniones le tocará a la Administración "hacer prevalecer el interés general y encontrar la mejor solución".
La semana pasada, la consejería abrió un periodo de consultas para recabar la opinión de todos los actores implicados en el negocio. Los empresarios hicieron llegar ayer al consejero, entre otras cuestiones, su negativa a contemplar cualquier escenario que no pase por una regulación fiscal que obligue a "pagar impuestos" a los propietarios de dichos inmuebles. Estos mantienen que en la gran mayoría de las ocasiones se trata de actividades que complementan la economía familiar y no de un negocio propiamente dicho. La pasada semana Isaac Castellano definió este tipo de alojamiento como "una modalidad turística que genera actividad económica".
Otra de las cuestiones tratadas fue la confluencia de los usos residencial y turístico en un mismo inmueble y los posibles conflictos que se derivan de ella. "Nosotros ya dijimos que era un error", recordó Mañaricua en referencia a la posibilidad abierta por la Ley del Suelo de consolidar el uso de apartamentos como vivienda habitual.
