El grupo Anfi ha incorporado, de forma pionera, a una decena de camareros de piso a su plantilla. De esta forma se busca cumplir la Ley de Igualdad, que obliga a equiparar el número de empleados por sexo. De igual forma, la crisis financiera provocó mayor demanda por parte del sexo masculino a aspirar a este sector laboral, quienes tendrán la tarea de limpieza de habitaciones. El director de Recursos Humanos de Anfi, Santiago Zerpa, explicó las ventajas que supone esta equiparación de sexo: "Los camareros están dando un rendimiento muy bueno y tiene buena aceptación en los clientes". Aun con estas incorporaciónes, la balanza se sigue decantando en un 60% de mujeres, diez puntos por encima de lo que dicta la legislación. En los puestos de responsabilidad, en cambio, los hombres ocupan el 55%. En cuanto a diferencias salariales no existen de ningún tipo: "Cuidamos la igualdad de sueldos", indicó Zerpa.LA PROVINCIA