El Estado penalizará a la flota atunera del Archipiélago en la próxima campaña por haber sobrepasado el cupo de atún rojo que tenía asignado este año en 51 toneladas. La Secretaría de Pesca comunicó ayer a los pescadores de las Islas que el año que viene restará de la cuota que le conceda a Canarias las toneladas de más capturadas durante este ejercicio, por lo que los atuneros confían en que Madrid cumpla sus promesas y ceda de una vez a sus demandas para que en 2019 les asigne una mayor porción del cupo nacional y sus posibilidades de pesca no se vean muy mermadas.
El 26 de marzo arrancó la zafra de este túnido en el caladero canario y el jueves de la semana pasada el Ministerio de Pesca decretó el cierre precautorio de la pesquería para hacer recuento de lo capturado hasta entonces y, en caso de que los 243 buques cañeros no hubiesen consumido las 255 toneladas que les correspondían este año, reabrir la zafra o realizar un sorteo para asignar la cuota restante. Finalmente no ha sido así. Los atuneros canarios pescaron 1.283 piezas con un peso medio de 239 kilos cada una. Esto es, sobrepasaron en 51 toneladas el límite fijado, un 20,17% más de lo previsto.
La Comisión Internacional para la Conservación del Atún Atlántico (Iccat) aprobó en noviembre un aumento del 46% del volumen de pesca para España en los próximos tres años. Con este incremento, el Estado contó con 5.000 toneladas para hacer el reparto entre los distintos caladeros, si bien 250 se destinan al Fondo de Maniobra para compensar a la pesca artesanal.
El reglamento europeo CE 1224/2009 de 20 de noviembre establece que la cuota asignada al país debe ser respetada en todo momento, ya que de no ser así podría dar lugar a deducciones en la distribución que se realiza entre los Estados miembros en la siguiente zafra. En principio, tal y como indicó el secretario general de la Federación Provincial de Cofradías de Las Palmas, Francisco Jiménez, Madrid trasladará esta penalización a la flota canaria en la próxima campaña.
La zafra de este año ha estado marcada por la polémica. Pese a que inicialmente el comienzo de la pesquería estaba fijado para el 19 de marzo, ésta comenzó una semana después. Con el objetivo de establecer un "reparto equitativo", la Secretaría de Estado de Pesca propuso a los atuneros isleños asignar a cada buque una cuota que podrían gestionar de forma individual o conjunta. Sin embargo, la falta de consenso en el sector hizo que se mantuviese la modalidad de pesca olímpica para esta campaña. Con ella, cada embarcación sale a faenar sin un límite fijado de antemano, lo que provoca que, en cierto modo, compitan entre sí para capturar el mayor número de ejemplares posible antes de que se consuma la cuota.
En la regulación de la pesquería que se llevará a cabo en 2019, Pesca busca implantar ya el nuevo modelo de captura, pues el canario es el único caladero del país donde aún impera la modalidad olímpica. Con este cambio de mecanismo resulta más fácil controlar el consumo de la cuota ya que cada atunero conoce antes de salir a pescar cuánto puede capturar. Hasta ahora, los buques que cuentan con el Diario Electrónico de Pesca (DEA) informan al Ministerio desde el mar de las capturas que han realizado mientras que aquellos que no disponen de este dispositivo no las comunican hasta llegar a puerto.
