¿Aspira a continuar en el Gobierno tras las elecciones del próximo año?
No. Mi meta es terminar mi tarea de gobierno. Es una etapa de mi vida que acaba en mayo de 2019.
¿Le gustaría seguir?
Me gusta trabajar como lo estoy haciendo, pero insisto en que esto es una etapa que termina.
¿No va a ir en ninguna lista?
No tengo previsto ir en ninguna lista.
¿Ni como independiente?
Ya le digo que no tengo previsto ir en ninguna lista.
¿Por qué su presencia en eventos como la presentación de la alianza entre Coalición Canaria y Unidos?
Me pidieron que fuera. Estoy participando en el Gobierno junto a unos compañeros que en ocasiones me piden que acuda a actos. Yo creo que debo estar y apoyar, pero mi presencia en ellos no tiene ninguna lectura.
¿Tiene el mismo perfil político que hace tres años?
Sí.
O sea, ninguno.
He venido a gestionar y sigo haciéndolo. He aprendido y he entendido la parte política de las cosas. Ya dije cuando llegué que es bueno incorporar la parte de gestión, la ejecutiva. Y es bueno porque hay que entender el sacrificio y exigencia que tiene la política. La sociedad también tendría que tener un mayor grado de implicación y, con ello, de comprensión de ese sacrificio que supone dedicarse a lo público.
¿Qué ha sacado hasta la fecha de esta experiencia?
Ese mayor conocimiento de lo que es la política. En sentido inverso, he podido ayudar a algunos políticos a entender algo más del mundo privado. Que exista ese flujo bidireccional beneficia a todos. Antes de llegar pensaba que era bueno y lo comprobé en los primeros seis meses. Ahora, a un año de acabar, lo tengo aún más claro.
