El vicepresidente del Gobierno de Canarias, Pablo Rodríguez (CC), ha defendido hoy que en los vuelos con la península "no existe, a día de hoy, una subida artificial de precios" a raíz del aumento de la ayuda de residente, como han denunciado diversos sectores sociales y políticos. El también consejero de Transportes ha atribuido la sensación que tienen los viajeros de que volar se ha vuelto más caro a que "lo que sí ha habido es un extraordinario aumento de la demanda" como consecuencia del abaratamiento provocado por la ampliación del descuento a los isleños, que tienden a "agotar los precios más económicos" en primer lugar, con lo cual quienes compran sus pasajes más tarde se ven obligados a adquirir los de tarifas más elevadas.

Ya que el sector aéreo "los sistemas tarifarios son complejos" y es habitual que las diferentes plazas de un mismo vuelo se vendan a distintos precios, según cuáles sean y también según el medio y el momento en que se lleva a cabo su compra, ha argumentado.

Pablo Rodríguez ha dicho, no obstante, que "espera que la oferta se adecuará a la demanda y habrá más plazas económicas" cuando se normalice la aplicación de la bonificación del 75 %, que se puso en marcha hace unos meses.

Y, en todo caso, ha subrayado que el control de posibles maniobras empresariales para engrosar sus beneficios a costa de embolsarse esas ayudas como las denunciadas no es competencia del Gobierno de Canarias no del estatal. En este sentido, Rodríguez recordó que el Ministerio de Fomento cuenta con un Observatorio de Precios cuyos datos no se dan a conocer públicamente, por lo que demandó del departamento que ahora dirige José Luis Ábalos que se conozca la evolución de los precios de los billetes aéreos entre Canarias y la Península.

Regasificadora

Por otro lado, la naviera Fred. Olsen advirtió de la necesidad de contar con el gas natural licuado como alternativa al fuel como combustible de los barcos ante las perspectiva de que en 2020 entre en vigor la orden comunitaria que varía la composición de los combustibles pesados y se encarezcan entre un 30 y un 40%.

El director de flota de la compañía, Juan Ignacio Liaño, ha recordado que, de hecho, su empresa "ha apostado desde hace tiempo por el gas licuado", preparando la adecuación de sus buques al cambio de combustible pese a requerir de inversiones millonarias, pero también ha precisado que su iniciativa ha quedado en suspenso a consecuencia de la oposición a la creación de una planta regasificadora de distintos sectores de Gran Canaria. Puesto que, de optarse por el gas, "para que sea rentable, desde el punto de vista de la logística, hace falta una regasificadora", ha argumentado, subrayando que "eso es lo que dicen los proveedores" de dicho combustible.