Al menos tres startups israelíes se han decidido a estudiar sobre el terreno su implantación en las Islas. Las negociaciones se mantienen dentro de la más estricta discreción, pero sí se sabe que dos de ellas están especializadas en el ámbito marino-marítimo. El estado de Oriente Medio se ha erigido en uno de los más punteros en el ámbito tecnológico, con numerosas empresas diseminadas por India o China, entre otros estados. La presencia de sus negocios de raíz innovadora también es notable en la vertiente oriental africana, en este caso para contribuir a la resolución de problemas en el ámbito humanitario. En este contexto, Canarias se ha revelado como un punto estratégico desde el que replicar el modelo para el África Occidental.
Es solo uno de los atractivos. El Archipiélago también aparece ante los ojos de las empresas que ya exploran su desembarco como una posibilidad real para testar la validez de sus proyectos. Y no solo en el ámbito de la economía azul, también en el del turismo, los viajes y el aeroespacial.
La pasada semana se reinauguró en Tel Aviv el Israeli Innovation Center de la organización no gubernamental (ONG) Simon Peres para la Paz y la Innovación. Entre los cientos de invitados estuvieron presentes el presidente de Google, Eric Schmidt; el fundador de Alibaba, Jack Ma, o el vicepresidente chino Wang Qishan. Como anfitrión ejerció el presidente de la ONG, Chemi Peres, también cofundador de Pitango, el principal fondo de inversión israelí.
En esa olla en la que se cocinaron importantes relaciones mundiales para la investigación y la innovación, y se afianzaron las ya existentes, solo pudo encontrarse a dos españoles. Además, los dos canarios. Una, la enviada especial de un diario de tirada nacional; el otro, el gerente de la Asociación Canaria de Startups, Empresas de Base Tecnológica de Inversores Ángeles (Emerge), Moisés Santana.
Un año de trabajo
La presencia de Emerge no es casual. Desde hace un año, la asociación promueve el acercamiento a startups e inversores israelíes. "Es la confianza el factor que facilita el acceso a estas redes y hay que estar en ellas, porque es donde radican las posibilidades reales de crecimiento", explica Santana.
En otras palabras, siendo cierto que el hándicap de la lejanía queda superado porque en el mundo de las telecomunicaciones no hay distancias, no lo es menos que en el presente se están generando, y a gran velocidad, las relaciones que van a marcar quiénes entran en los foros llamados a trazar el camino futuro.
La pelea entre los que se postulan como polos tecnológicos está abierta. Las ciudades, países o regiones que salgan triunfadoras serán las que se conviertan en las más atractivas para empresas tecnológicas, emprendedores e investigadores. Santana defiende que las Islas "deben sumarse a esta competición y ocupar espacios centrales en estas redes". Incluso a pesar de que el ecosistema de emprendimiento e innovación se está desarrollando en Canarias de manera lenta. Lo realmente relevante "es la velocidad que han alcanzado otros", aclara el gerente de Emerge. El objetivo es, por tanto, mostrar el atractivo para no quedar atrás.
Moisés Santana reconoce la existencia de esas relaciones con Israel, pero prefiere no entrar en el detalle de cómo están cristalizando. Más allá de que tres empresas israelíes hayan mostrado ya su interés por afincarse en las Islas, señala la necesidad de que se construya un modelo sólido del que tire una demanda real de un sector privado ávido de innovación.
Aparte de la creación de esas relaciones de confianza, capaces de abrir las puertas de las redes de inversión, Emerge considera necesario que emprendedores, grandes empresas y centros científico-tecnológicos canarios acompañen a agentes públicos y privados de terceros países en el desarrollo de sus proyectos. Por ejemplo, los orientados a paliar los problemas que sufren algunos países africanos en agua, energía o alimentación.
En este ámbito, la asociación, con apoyo del Gobierno canario entre otros, ha organizado ya dos ediciones de Emprendimiento e Innovación para el Desarrollo, un evento que se celebrará el próximo año en Mauritania bajo el título Incrementar la resiliencia en las ciudades subsaharianas: agua, energía y alimentos.
