La aerolínea canaria Binter estudia la posibilidad de ampliar sus rutas con África y los países candidatos para ello son Ghana y Costa de Marfil. "De momento solo podemos decir que los tenemos en mente", explicó el vicepresidente de la compañía, Rodolfo Núñez, durante la firma del acuerdo de compra de tres aviones al fabricante brasileño Embraer.

Las dos primeras aeronaves llegarán en octubre del próximo año y la tercera, un mes después. La operación, cuya cuantía supera los 301 millones de euros (342 millones de dólares), incluye la opción de compra de otros dos aparatos del mismo modelo (E195-E2). Será la primera experiencia con estos aviones de Embraer en Europa que ya cuentan con pedidos también en "Noruega y Suiza", según detalló el vicepresidente global de Ventas del Área de Aviación del constructor sudamericano, Arjan Meijer.

Estas nuevas adquisiciones vendrán a sustituir a los CRJ que Binter tiene alquilados y con los que atiende en este momento sus rutas con África. Es decir, las posibilidades de Ghana y Costa de Marfil se estudian sobre el papel y, en principio, son independientes de esta operación de compra. La compañía isleña será la propietaria de los aparatos, lo que generará alrededor de "150 empleos directos", expuso Núñez, ya que "las tripulaciones para cada avión las integran entre 25 y 30 personas".

Además, los motores canadienses Pratt & Whitney, modelo Limbo Fan, con los que cuentan y que ya tienen implemantados los ATR con los que Binter atiende el mercado interinsular, suponen "un ahorro de combustible de entre el 16% y el 17%", señaló el presidente de la aerolínea, Pedro Agustín del Castillo. Este mismo detalló que la configuración elegida, de 132 asientos -caben 146-, tiene por objetivo ofrecer "la mayor comodidad posible a los clientes". Prescindir de catorce plazas permite ganar tres centímetros entre las butacas.

Del Castillo señaló que la autonomía de estos aviones les permite desplazarse sin repostar hasta "Conpehague, toda Alemania, Estambul o Congo". No obstante, Rodolfo Núñez aclaró que el cielo europeo no es el objetivo de la aerolínea. "Miramos al sur", matizó.

El plazo de amortización de la operación firmada con un consorcio integrado por Santander. CaixaBank, BBVA, Bankia y Banco Sabadell es de 20 años. Al respecto, Núñez destacó "la capacidad de negociación" del consejero delegado de la compañía, Alfredo Morales, y el papel de la consultora Deloitte, "capaz de plasmar en papel" el plan de futuro de la aerolínea para terminar de convencer a las entidades bancarias.

En esa misma línea, Rodolfo Núñez recordó que el salto de la compañía al ámbito internacional estuvo presidido por la "prudencia. Lo hemos testado con aviones alquilados", continuó, "y ahora sabemos que el mercado existe". Esa prueba de viabilidad fue determinante para conseguir que cristalizaran las conversaciones en busca del capital necesario para afrontar la compra que ayer se rubricó.

En cuanto a los resultados obtenidos por la aerolínea canaria a lo largo de este ejercicio, su vicepresidente confirmó que el incremento de la subvención hasta el 75% del precio de los billetes para los residentes canarios se ha notado "muchísimo. El precio es un factor muy importante y ya se comprobó el año pasado", explicó en referencia a la implementación de la medida en los traslados entre islas. "En 2018 hemos seguido creciendo", abundó. También se ha dejado notar en las conexiones que desde este año se operan con Vigo y Palma de Mallorca.