La cuarta jornada del juicio del caso Jesuman estuvo protagonizada por los testigos llamados por la defensa. Las empresas JSP, Celgan y Café Ortega defendieron que la facturación de Comercial Jesuman y de los supermercados Cerca se ejecutaba de forma completamente independiente, aunque eran conocedoras de la relación familiar entre los responsables de Jesuman -los hermanos José Manuel, José Ignacio y Juan Jesús Hernández Pérez- y el encargado de Cerca, Iván Hernández Perera. No fue así el caso de Kalise Menorquina, cuyo representante legal aseguró que la compañía fabricaba marca blanca para Cerca, bajo un contrato en el que Jesuman figuraba como titular de los supermercados.

La representante legal de JSP declaró que su empresa vendía mercancía a Cerca a través de la sociedad Alimentcanarias, que fue constituida en el año 2000 por José Manuel -propietario del 99% de las acciones- y su hijo Iván -quien tenía el 1% de las acciones y fue designado como administrador único-. En ese sentido, el portavoz de Café Ortega testificó que le costaba recordar el nombre de las sociedades con las que facturaban a supermercados Cerca, "porque cambiaban de sociedad cada dos por tres". Lo que sí aseveró ante el tribunal fue que habían facturado a la cadena grancanaria a través de TP Novofinaciera -sociedad vinculada a Jesuman y cuyo administrador es Iván Hernández-, y que les generó una deuda que, aunque "era insignificante para el volumen de negocio con el que trabaja Café Ortega", intentaron cobrar en las oficinas que Cerca tenía en Mercalaspalmas pero cuando acudieron a las instalaciones "ya no estaban operativas".

Por su parte, el representante legal la compañía de productos lácteos Celgan señaló al empresario Iván Hernández como responsable de la cadena de alimentación Cerca y aseguró que nunca tuvo conocimiento de que Cerca tuviera algo que ver con Comercial Jesuman.

Por el contrario, el portavoz de Kalise Menorquina se mostró convencido de que estaban trabajando directamente para Comercial Jesuman porque, además de aparecer como titulares en el contrato, era quien abonaba las facturas de los productos de marca blanca que fabricaban para los supermercados Cerca. Según el representante legal, en 2003 Kalise Menorquina tuvo el primer contacto con Iván Hernández, quien fue presentado por Elías Mendoza, responsable de compras de Jesuman, por lo que hasta 2007 estaban convencidos de que trabajaban para la empresa tinerfeña. Incluso, cuando Iván Hernández empezó a operar con TP Novofinanciera "no sospechamos que era otra empresa, aunque sí era un contrato adicional al de Jesuman", afirmó en su declaración el portavoz de Kalise Menorquina.

El último en declarar fue José Miguel Sánchez González, exdirector de CajaSiete en Tenerife, quien confirmó ante el tribunal que Iván Hernández era cliente de una de las sucursales de la entidad bancaria en La Laguna. "Era una persona emprendedora y entre 1998 y 2010 nos presentó proyectos interesantes, todos al margen de la alimentación", declaró Sánchez, entre esas iniciativas se encontraban Tito Importaciones, Magna Computer y Recicaucho. Estos tres proyectos fueron respaldados por la entidad financiera, pero "terminaron en fallido", ocasionando una deuda de 3,6 millones de euros.

Para saldar parte de este débito CajaSiete se adjudicó dos naves comerciales, una en Las Chafiras y otra en Mayorazgo, propiedad de una de las sociedades de Iván Hernández. Además, hubo una finca en Fuerteventura que no pudieron incluir como pago porque "no era de titularidad de Iván, aunque pensábamos que sí por lo que él había manifestado", detalló Sánchez. Quien añadió que el principal acusado del caso Jesuman también le propuso operaciones inmobiliarias de gran envergadura en la zona de Toledo y Madrid, pero "no tenemos la dimensión adecuada para lo que él nos quería plantear", concluyó.