La economía canaria perdió el mes pasado una media de 13 puestos de trabajo cada hora. Se destruyeron así un total de 10.081 empleos. Aunque enero siempre es un mes devorador de puestos de trabajo porque expiran miles de contratos firmados en los comercios para la campaña navideña, lo cierto es que en esta ocasión ha sido especialmente voraz. Hay que remontarse a 2010, nueve años atrás, para encontrar un inicio de ejercicio peor que el de 2019. En enero de 2010 se destruyeron más de 13.000 empleos en el Archipiélago. Desde entonces nunca se habían perdido tantos puestos de trabajo en el primer mes del año.
Según los datos del Ministerio de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social, la media de trabajadores afiliados al sistema en Canarias fue en enero de 802.906 personas. Esa notable reducción de más de 10.000 afiliados en relación con las cifras de diciembre -un 1,24% menos en términos relativos- se hace notar también en la evolución del empleo en los últimos doce meses. Si bien la economía regional fue capaz de crear 22.349 puestos de trabajo entre enero de 2018 y enero de 2019 -un 2,86% más-, es igualmente cierto que el ritmo de creación de empleo se ralentiza de forma considerable. Hasta el punto de que ese incremento, que a simple vista puede parecer significativo, es el menor en ese período desde 2014. El menor, por tanto, del último lustro.
La economía del Archipiélago comienza así a moderar la velocidad con que viene creando empleo desde el fin de la crisis. Y comienza también a tener dificultades para seguir reduciendo el paro, con lo que se vislumbra una vez más la incapacidad estructural de las Islas para bajar el desempleo más allá de un determinado límite. Hay que recordar que ni siquiera en años de bonanza se ha bajado del 10% de paro.
El Ministerio contabiliza 209.419 desempleados en la Comunidad Autónoma. Son 2.404 parados más que en diciembre. Así pues, el mercado laboral cerró enero con la peor combinación posible: destrucción de puestos de trabajo y subida del paro. Y como ocurre en el caso de la creación de empleo, ese incremento del número de parados durante el mes pasado tiene también reflejo en el dato anual. Entre enero de 2018 y enero de 2019 el desempleo se redujo en Canarias en 6.282 personas. A pesar de que es un dato positivo, se trata de la disminución más pequeña desde la salida de la crisis. De enero de 2012 a enero de 2013 el paro aumentó en 15.534 personas. Desde entonces el desempleo se ha reducido en el Archipiélago cada comienzo de año en términos interanuales. Sin embargo, el ritmo se ha ralentizado sensiblemente a lo largo del último ejercicio. De enero de 2017 a enero de 2018 el paro disminuyó en más de 16.000 personas, y desde 2014 nunca lo hizo en menos de 13.000, de ahí que esta última caída implique una evidente desaceleración.
Es más, esa reducción del desempleo en 6.282 personas es en términos porcentuales del 2,9%, el peor dato de todo el país. El paro bajó en los últimos doce meses en todas las comunidades autónomas, pero en Canarias fue donde menos lo hizo y el único territorio en que la reducción no llega al 3%. En Andalucía, que tradicionalmente acompaña al Archipiélago en los últimos puestos de casi cualquier ranking laboral, el paro cayó un 3,32%, casi medio punto más que en las Islas pese a que es el segundo peor dato. Y en Navarra, Madrid y Castilla-La Mancha, las tres autonomías que lideran la lucha contra el desempleo en el último año, la caída superó el 8%. En todo el país el paro se redujo de enero de 2018 a enero de 2019 en 190.767 personas, un 5,49%, esto es, dos puntos y medio más que en Canarias.
Los números ponen de manifiesto, por tanto, que Canarias baja el paro más lentamente que el conjunto del país, si bien hay que recordar que las Islas empezaron antes que el resto de comunidades el proceso de recuperación. No extraña así que las dos provincias del Archipiélago estén también a la cola. El mes pasado el desempleo aumentó en 1.319 personas en la provincia de Las Palmas, un 1,23%, y en 1.085 en la de Santa Cruz de Tenerife, un 1,09%. En cambio disminuyó durante el último año en 3.728 personas en la provincia oriental, un 3,31%, y en 2.554 en la demarcación tinerfeña, un 2,48%. Ocurre así lo mismo que a nivel autonómico: el dato es positivo porque se reduce el paro pero la provincia de Santa Cruz de Tenerife es entre las 50 del país la tercera en que menos lo hace. La de Las Palmas es la quinta por la cola.
En cuanto a las relaciones laborales, los empresarios y trabajadores del Archipiélago firmaron en enero un total de 67.190 contratos. Son un 5,2% más que en diciembre, lo que evidencia que más contratos no necesariamente significan más puestos de trabajo. En diciembre se suscribieron 3.332 contratos menos pero había 10.000 trabajadores más afiliados. Eso sí, la temporalidad bajó en Canarias casi un punto, mientras que creció más de un 6% de media. El 12% de los contratos en las Islas son indefinidos.
