Los tomateros buscan rutas alternativas para abaratar el coste que supondrá la exportación de producción a Reino Unido tras el brexit. La pérdida de cuota de mercado en suelo británico ante una posible desconexión sin acuerdo no es lo único que preocupa al sector, sino también la pérdida de las subvenciones estatales para sufragar el transporte. Estas ayudas, que buscan compensar la lejanía y la insularidad, solo se destinan para los agricultores que realizan envíos de mercancías a países de la Unión Europea (UE), por lo que los tomateros que vendan en Reino Unido, que tendrá consideración de tercer país al dejar de ser miembro del bloque comunitario, dejarán de percibirlas.
Este nuevo escenario ha obligado al sector a mover ficha. El portavoz de la Federación Provincial de Asociaciones de Exportadores de Productos Hortofrutícolas de Las Palmas (Fedex), Gustavo Rodríguez, explicó ayer que los operadores estudian nuevas vías para hacer llegar el tomate a Reino Unido. Aunque aún no hay nada en firme, el sector baraja la posibilidad de enviar los tomates a Holanda o Francia y, desde allí, fletar algún barco hasta el puerto de Reino Unido "más cercano o viable".
Los productores de tomate, pepino, hierbas aromáticas, frutos tropicales y subtropicales y plátano estarán presentes desde hoy y hasta el viernes en la Fruit Logistic de Berlín (Alemania), la mayor feria de productos hortofrutícolas que se celebra en Europa. El Ejecutivo regional, a través de las consejerías de Economía (Proexca) y Agricultura, apoya la participación de las empresas canarias -Fedex, Asprocan, Tenerifresh y Sweet Papaya- con un estand de 80 metros cuadrados donde los productores celebrarán encuentros comerciales dirigidos a potenciar las ventas en mercados exteriores y a promover nuevas estrategias de comercialización.
Pese a que el titular de Agricultura, Narvay Quintero, indicó tras el Consejo de Gobierno del lunes que el objetivo es buscar vías alternativas al tomate y al pepino que se exporta a Reino Unido, el sector se resiste a abandonar un destino en el que está presente desde hace más de 130 años.
La mitad de las exportaciones de Fedex, que cuenta con doce empresas asociadas, se comercializa en Reino Unido. La otra parte se reparte entre Escandinavia -Noruega, Suecia y Dinamarca-, Alemania y Francia. Rodríguez confía en que el sector mantenga sus envíos a suelo británico porque, de momento, ningún cliente ha mostrado su negativa a continuar la relación comercial tras la consumación del brexit, que en principio tendrá lugar el 30 de marzo si la primera ministra británica, Theresa May, no lograr cerrar un nuevo acuerdo con la UE que incluya una prórroga. El portavoz de Fedex reconoce que el establecimiento de aranceles elevados puede generar dificultades. No obstante, confía en que la fortaleza de las relaciones forjadas durante más de un siglo valgan para mantenerse en el mercado. Más aún, sostiene, porque es complicado crecer en países en los que ya están asentados o en otros nuevos porque ya hay operadores asentados.
La misma confianza muestra Javier Mosquera, uno de los propietarios de Tenerifresh. El 30% de su facturación procede de los envíos a Reino Unido, un 50% de las ventas en Alemania, Suiza, Bélgica, Portugal y Península y un 20% de la comercialización en el Archipiélago. Bajo su punto de vista, "la pérdida de las subvenciones es lo más dañino", por lo que espera que se encuentren nuevos caminos para que el impacto en la actividad sea el menor posible.
La Asociación de Organizaciones de Productores de Plátano de Canarias (Asprocan) asiste a Berlín con la intención de buscar nuevos destinos a los que acudir cuando el mercado nacional no sea capaz de absorber toda la producción y así evitar, además, un hundimiento de precios. Su presidente, Domingo Martín, expone que en función del clima, la producción platanera varía de un año otro. El pasado ejercicio, por ejemplo, hubo un menor nivel de ventas en España porque la cosecha fue menor que otros años, "no porque el plátano haya perdido terreno frente a la banana". El hecho de contar con menos volumen también provocó que la exportación a otros países no fuera significativa durante ese año. En total se vendieron 1,7 toneladas a Suiza, Marruecos, Mauritania y Francia. En paralelo, la asociación realiza pruebas en Alemania. "Lo que se pretende es tener abiertas válvulas de seguridad a las que se pueda recurrir", reiteró, en función de la evolución de la campaña.
La Fruit Logistic de Berlín reunirá a 3.239 expositores y 78.000 visitantes hasta el viernes. Quintero acudirá junto con el viceconsejero de Sector Primario, Abel Morales Entre las reuniones previstas, destaca el encuentro durante esta mañana con el embajador español en Alemania, Ricardo Martínez.
