Las educadoras infantiles de 0-3 años se han unido este martes en paros y protestas sin precedentes en el sector para decir "basta" a unas condiciones laborales que creen "indignas" por su formación y responsabilidad, pues no llegan a los 900 euros al mes.

Los paros han sido secundados en un 80 % de media en toda España, según CCOO, único sindicato convocante, mientras que la Asociación de Centros Autónomos de Enseñanza Privada (Acade) ha cifrado el seguimiento en menos de un 2 % en las escuelas infantiles privadas.

Las protestas han tenido lugar un día antes de que se firme el próximo convenio colectivo para cerca de 80.000 trabajadoras (el 95 % es femenino) de más de 10.000 centros, tanto privados como también públicos pero de gestión indirecta, pues las distintas Administraciones establece una concesión con una entidad privada.

Acade ha asegurado que el convenio a firmar cuenta con el preacuerdo entre patronales y UGT, USO Y FSIE, que representan a más de un 60 % de los trabajadores, aunque han señalado que apuestan "por la negociación y el diálogo con todos los interlocutores sociales".

"Los 930 euros brutos que el nuevo convenio pretende establecer de salario base para las educadoras es muestra del ninguneo y desprecio hacía un colectivo con retribuciones congeladas desde hace más de siete años", ha criticado por su parte CCOO.

Desde los últimos siete años y medio los salarios en este ciclo de Infantil han estado congelados y CCOO ha opinado que el nuevo convenio no compensará "en absoluto" ese sacrificio.

Este sindicato ha informado en nota de prensa de los porcentajes del seguimiento en las distintas comunidades: Galicia 90 %, Asturias 60 %, Cantabria 60 %, País Vasco 60 %, La Rioja 80 %, Navarra 60 %, Aragón 70 %, Cataluña 80 %, C. Valenciana 80 %, Castilla y León 80 %, Madrid 75 %, Castilla-La Mancha 50 %, Extremadura 50 %, Andalucía 70 %, Murcia 55 %, Baleares 80 % y Canarias 60 %.

"Educamos sonrisas con un sueldo de risa", "mi vocación no paga mis facturas", "vergüenza de convenio, nuestra formación y vocación merecen ser reconocidas", "la profe luchando también está enseñando", "titulada y no valorada".

Son algunos lemas coreados por las varias cientos de educadoras que se han concentrado al mediodía en Madrid ante la sede de Acade para rechazar el convenio que está por firmarse.

Además de en Madrid, donde esta tarde también está previsto un acto "reivindicativo y lúdico festivo" en El Retiro, en otras ciudades ha habido también reivindicaciones de educadoras infantiles, ha señalado el sindicato convocante.

"Nos plantamos, basta ya, necesitamos seriedad en este asunto, dignificar esta profesión, que sea reconocida respetada y valorada entre el resto de la comunidad educativa", han comentado a Efe María y Ángela, educadoras de un centro del barrio de Vallecas.

"Trabajamos en algo que nos gusta, es vocacional, sí, pero no es gratuito. Queremos vivir de ello no tener un segundo empleo para poder sobrevivir al mes pues cobramos menos del salario mínimo interprofesional, de cuya subida nosotras no hemos notado nada", han argumentado.

Muchas de las educadoras que han secundado el paro han portado camisetas verdes en las que podía leerse: "Por un convenio justo, centros de Educación Infantil 0-3 años. Educamos, no guardamos".

Se trata de un sector integrado por maestras -una carrera de cuatro años- y por educadoras infantiles -grado superior de FP- y, aunque en 0-3 años solo es obligatoria la segunda opción, la mayoría cuenta con la carrera universitaria, ha apuntado Teresa, una madre y educadora que vive el problema "por los dos lados".

Ha acudido a la concentración madrileña con su hija porque cree, ha dicho a Efe, que se va a firmar un convenio en el que "faltan muchas mejoras salariales y laborales".

"No llegamos a fin de mes. El convenio general de los trabajadores tiene unas condiciones generales mejores que el nuestro y eso es ilegal", ha argumentado.

"Pero como madre no hay preocupación por la cantidad de vocación y profesionalidad que hay dentro de las escuelas infantiles", ha añadido Teresa, que ha pedido que no se llame a los centros guarderías porque allí "no se guarda a nadie sino que se cuida".