¿Cuál es la relación entre la transición energética y la economía?
El impacto es directo porque la energía es uno de los factores esenciales para que la economía de los próximos años se pueda desarrollar con más empuje. Históricamente, siempre ha habido primero una revolución energética y después los cambios se han ido introduciendo en la economía. En la actualidad, nos estamos jugando la generación de un modelo basado en energías limpias, una progresiva desaparición de los contaminantes como el carbón y el desarrollo de una movilidad no contaminante.
¿Como tiene que afrontar España la transición energética?
Gracias al compromiso adquirido a través de acuerdos internacionales se fomenta la reducción de gases contaminantes y se promocionan las energías limpias. A partir de ahí, entra en juego una transición energética ordenada y racional, porque está muy bien pensar en los objetivos pero tenemos que hacerlo con la prudencia y la racionalidad económica suficiente. Los recursos económicos son limitados y la economía española no se puede permitir invertir en energías que no están maduras o en sistemas de generación se quedan obsoletos en pocos años.
¿En qué punto del camino de la transición está España con respecto a Europa?
España está cumpliendo los objetivos europeos y el 20% de la energía que se genera en el país ya es de origen renovable, que era uno de los objetivos para 2020. En relación a la movilidad urbana, España está más atrasada que otros países. Con respecto a la eliminación de energías contaminantes el país va en la línea de la media europea, por ejemplo con el cierre del carbón o de las centrales nucleares. Aquí podemos producir mucha energías limpias gracias a las condiciones meteorológicas del país y a la capacidad tecnológica que se ha ido desarrollando en materia de acumulación energética.
¿En Canarias se den las condiciones para llegar a autoabastecerse con energías limpias?
Se dan las condiciones pero hay que pensar en incrementar la generación de renovables. Además, hay que reforzar la energía de respaldo, basada en ciclos combinados de gas y no en carbón o fuel, porque las renovables son intermitentes y hay picos de demandas que no pueden cubrir. También hay que mejorar las interconexiones energéticas entre las Islas, para que si en una isla sobra energía se pueda canalizar a otra.
¿Cree que la prohibición radical de los coches diesel es adelantarse a los tiempos o es un suicidio económico?
El proceso tiene que ser ordenado y racional, por lo que prohibirlo de golpe no tiene sentido. Además, todavía los coches 100% eléctricos son muy caros y muchas familias de renta media no pueden permitírselo. Otro de los aspectos a tener en cuenta son los puntos de recarga, que son insuficientes, y hay que saber en qué estado están las redes para soportar que todos se enganchen para cargar su coche.
