Toda una vida detrás de un mostrador, rodeada de batas, camisones, vestidos, aconsejando tallas y sorteando crisis. Loli empezó a trabajar a los 14 años en una mercería de La Coruña en los tiempos de la España del atraso y la pobreza, y en los años 80 abrió su propia tienda. 64 años trabajados convierten a Dolores en la persona que más ha cotizado a la Seguridad Social. Orgullosa, exhibe la medalla al Mérito del Trabajo que le concedieron en 2016. Hoy sigue en la tienda. Quiere vender el género que le queda antes de marcharse a casa a descansar.