La huelga de los trabajadores de Ryanair afectará a cuatro de cada diez vuelos internacionales, pero no tendrá consecuencias en los trayectos que unen las Islas con la Península. Así lo decidió ayer el Ministerio de Fomento, que estableció unos servicios mínimos del 100% de los vuelos en islas y del 60% para los trayectos al extranjero durante el paro que celebrarán los tripulantes de cabina los días 1, 2, 6, 8, 13, 15, 20, 22, 27 y 29 de septiembre, en protesta por el cierre de las bases de Girona, Lanzarote, Tenerife Sur y Las Palmas de Gran Canaria.

"La decisión de Fomento es el acto más vergonzoso que hemos visto desde hace años", se queja Jairo Gonzalo, secretario de Organización de USO-Ryanair. "Están plegándose a los intereses de una empresa y perjudicando al resto de las aerolíneas, a las que no habían permitido unos servicios mínimos tan altos, pues siempre se habían situado entre el 80% y el 90%", asegura.

El sindicalista critica que "para subir tanto los porcentajes, el Ministerio se escude en que la huelga se celebra en pleno regreso de las vacaciones, algo que podríamos entender en el caso del domingo 2 de septiembre, pero no para el resto del mes, cuando la operación retorno ya ha concluido. Es una tomadura de pelo". USO piensa "denunciar el decreto del Gobierno central" y concentrarse frente a las sedes de los ministerios de Fomento y Trabajo los próximos días 2 y 6 de septiembre a las 12.00 horas.

En cuanto a los vuelos internacionales que tendrán que ser cancelados por el paro laboral, será la compañía la que tenga que facilitar un listado a la Dirección General de Trabajo, al Ministerio de Fomento y a los trabajadores. "Vamos a estar atentos a lo que haga la empresa y a comprobar que, efectivamente, el número de trayectos que eligen coincide con el 60% de servicios mínimos y no lo supera". Además, Gonzalo recuerda que el año pasado Ryanair no canceló ningún vuelo pensando que el seguimiento de la huelga sería bajo "y se pararon ocho de los nueve aviones que operan en Canarias, con el consecuente perjuicio para todos los pasajeros".

Preaviso de los pilotos

El sindicato Sepla registró ayer un preaviso de huelga de cinco jornadas en septiembre para los pilotos de Ryanair en protesta por lo que consideran el cierre "injustificado" de las cuatro bases españolas, lo que conllevará el despido de unos 150 pilotos "sin ningún motivo", tal y como explicó en rueda de prensa el miembro de la sección sindical de Sepla en Ryanair, Francisco Gómez, que criticó que la compañía esté "montando un conglomerado de empresas de low cost del low cost".

Este paro laboral tendría lugar los días 19, 20, 22, 27 y 29 de septiembre -los últimos cuatro coincidentes con la tripulación de cabina-, aunque la intención por parte del sindicato es negociar con la compañía hasta "agotar los plazos y los servicios de mediación" para evitar así perjudicar a los pasajeros. El pasado martes, el Sepla interpuso una petición de mediación ante el Servicio Interconfederal de Mediación y Arbitraje (SIMA) para reunirse con la compañía, cuya fecha será anunciada en un plazo aproximado de 72 horas.

Francisco Gómez criticó que la compañía esté estableciendo bases de otras aerolíneas del grupo en aeropuertos españoles, como la de Lauda Motion en Palma de Mallorca, "haciéndose la competencia a sí mismo", que esté ofertando a los pilotos de Ryanair Sun trabajo en Canarias y que siga haciendo contrataciones y ofreciendo promoción interna para comandantes en las Islas. En ese sentido, el representante sindical de los pilotos concluyó que la aerolínea "está montando un conglomerado de empresas del bajo coste del bajo coste" y que los recortes no tienen justificación "ni comercial ni organizativa", sobre todo en el caso de Canarias, donde "los vuelos van llenos y el precio es casi el doble de la media".