Canarias registró 633 desahucios por el impago del alquiler entre abril y junio de este año, lo que supuso una caída del 11,6% con respecto al mismo periodo del ejercicio anterior y el primer descenso en este tipo de lanzamientos en dos años y medio. Pese al retroceso, el número de desahucios como consecuencia de procedimientos derivados de la Ley de Arrendamientos Urbanos (LAU) es el quinto más alto desde 2013.

El descenso de este tipo de lanzamientos en las Islas durante el segundo trimestre es el sexto más bajo del país. Aun así, el ritmo de decrecimiento se sitúa por encima de la media (-6,6%), según el informe Efectos de la crisis en los órganos judiciales publicado ayer por el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ). El mismo documento recoge que entre 2013 y 2018 el número de desahucios a inquilinos por no abonar el arrendamiento creció un 12,59%, al pasar de 2.176 a 2.450.

Los lanzamientos practicados en el Archipiélago como consecuencia de procedimientos de ejecución hipotecaria continúan con su tendencia bajista. En este caso la caída entre abril y junio fue del 35,9%, lo que significó el mayor descenso desde hace seis años. En total se contabilizaron 214 desahucios por este motivo, el volumen más bajo desde 2013.

En términos generales, los juzgados canarios ordenaron 904 lanzamientos, un 18,6% menos que el segundo trimestre del ejercicio anterior. Entre 2013 y 2018, el número de desahucios también se contrajo. En concreto se redujo un 12,08%, al pasar de 4.331 a 3.808.

En lo a que a juicios verbales posesorios por ocupación ilegal de viviendas se refiere, en el segundo trimestre los juzgados canarios ingresaron 69 casos, la quinta cifra más alta del país tras Cataluña (254), Andalucía (221), Madrid (92) y la Comunidad Valenciana (90). Ya se han resuelto 38, pero aun así siguen en trámite 95 demandas que representan el 6,11% del país (1.554).