Las centrales eléctricas de Endesa en Canarias están renovando la flota de vehículos utilizados para labores y desplazamientos internos dentro del perímetro de sus instalaciones, según ha informado la compañia en una nota.

En concordancia con el Plan de Movilidad de la compañía, los centros de producción del Archipiélago han incorporando diversos modelos de furgonetas eléctricas que dan servicio a diario a las decenas de traslados de personal y materiales que son necesarios para la correcta operativa de estas infraestructuras.

Tanto por la extensión de las centrales como por la frecuencia de los desplazamientos, el coche eléctrico se establece con la alternativa adecuada para la movilidad en el ámbito interior en las centrales. Hasta ahora se han incorporado nueve vehículos eléctricos a la flota de las centrales canarias, que dan servicio en las instalaciones de Barranco de Tirajana (Gran Canaria), Granadilla (Tenerife), Los Guinchos (La Palma) y Llanos Blancos (El Hierro).

A través de su Plan, Endesa impulsa el uso de la movilidad eléctrica tanto entre sus clientes como dentro de la compañía promoviendo la electrificación de su flota corporativa y los vehículos de sus empleados. Así, la compañía tiene el objetivo de electrificar la mitad de su flota corporativa (operativa, comercial y de representación) en tres años, lo que supone que, en 2021, tendrá incorporados a ella más de 400 vehículos eléctricos puros y cerca de 600 híbridos que permitirán un ahorro de emisiones a la atmósfera de 1.779 toneladas de CO2.

Los empleados de la compañía también han demostrado su compromiso con la movilidad eléctrica en las sucesivas ediciones del Plan de movilidad en las que 60 trabajadores de Canarias han adquirido un coche eléctrico particular, mientras que a nivel nacional son en torno a 700 los trabajadores que se han apuntado a la movilidad eléctrica. Los vehículos eléctricos particulares de los empleados de Endesa han recorrido más de 23 millones de kilómetros y han evitado la emisión a la atmósfera de más de 3.400 toneladas de CO2 recurrentes cada año, así como la emisión de partículas y NOx, contribuyendo así a la mejora de la calidad del aire en las ciudades.

Además de promover el uso del coche eléctrico en la empresa, Endesa anunció hace un año la inversión de 65 millones de euros para impulsar una red de con más de 8.500 puntos de recarga en lugares de acceso público hasta 2023. A través de estas acciones la compañía demuestra su apuesta por la movilidad sostenible y la electricidad como vector capaz de conciliar los requerimientos medioambientales con las necesidades energéticas de los ciudadanos.