No es fácil encontrar gangas en el mercado inmobiliario. El ladrillo vuelve a ser una inversión segura, y eso se paga. De hecho, solo una de cada cuatro viviendas en venta en la Comunidad Autónoma cuesta menos de 100.000 euros, y casi un 20%, es decir, dos de cada diez, valen un mínimo de 200.000. Así lo pone de manifiesto la tasadora Euroval en su último informe de coyuntura inmobiliaria, correspondiente al mes pasado. Los expertos del Instituto de Análisis de Euroval, filial de la multinacional alemana IC Immobilien Holdings GmbH, también revelan que es más fácil encontrar casas baratas en Santa Cruz de Tenerife que en Las Palmas de Gran Canaria.

Los analistas explican que en el mercado inmobiliario isleño hay en estos momentos una tendencia en el segmento de la vivienda nueva y otra en el de las casas usadas. En cuanto a los edificios de nueva construcción, el negocio en la región tiene características muy similares a las de la actividad en la mayor parte del país, esto es, pocas operaciones de compraventa y, además, "las que se producen son relativamente caras". Sin embargo, el comportamiento del mercado en el caso de los pisos o casas de segunda mano se rige en Canarias por sus propias normas.

En el Archipiélago las operaciones se mantienen sin grandes altibajos, pero los precios suben. Una subida generalizada que se ha producido en mayor o menor medida dependiendo de la zona en cuestión. Así, resulta que un 26% de las casas en venta en la región cuestan menos de 100.000 euros, mientras que en el otro extremo, solo un 3%, tres de cada cien, valen más de 300.000 euros. Un 14% tienen precios que oscilan entre los 200.000 y los 300.000 euros y un 56%, más de la mitad, se ofertan por entre 100.000 y 200.000 euros.