El agua Fuentealta surge de las nieves y lluvias caídas en el Teide y se filtra durante más de 30 años hasta llegar al manantial ubicado enel municpio de Vilaflor. Durante sus más de 40 años de vida, en Fuentealta han apostado por una gestión sostenible basada en la mejora continua de todos los procesos y el firme compromiso de reducir al máximo el impacto medioambiental, a través de acciones como la reutilización y el reciclaje y aplicando la innovación en todos los ámbitos de la actividad. En concreto, Fuentealta ha avanzado considerablemente en la reducción del uso de plástico, hasta el punto de ser el primer envasador canario que ha incorporado un 25% de PET reciclado en sus botellas. Han aplicado esta medida en los formatos de 0,50 y 0,33 litros, los que tienen mayor presencia en el mercado, para posteriormente ir incorporando el resto de tamaños. Esto supone la utilización de una cuarta parte menos de plástico nuevo por cada botella. Cuando finalice la implementación de esta medida Fuentealta evitará el uso de más de 100 toneladas de plástico al año. "Además, con ello nos estamos anticipando al cumplimiento de la normativa europea que exigirá el uso de un 25% de PET reciclado en los envases en el año 2025", afirman desde la compañía. La incorporación del PET reciclado se suma a otras acciones que Fuentealta ha incorporado en sus procesos de forma progresiva en los último años, como la reducción en un 24% del plástico de los tapones o la participación regular en campañas de limpieza de playas y fondos marinos, entre otros. Fuentealta es también, desde su origen, una empresa comprometida con el desarrollo social de la isla y el fomento de hábitos de vida saludable. En los últimos tres años Fuentealta ha donado más de 600.000 litros de agua en casi 500 acciones solidarias y eventos deportivos en Tenerife. Además, el cambio de imagen de Fuentealta bajo el movimiento #HazQueFluya, puesto en marcha el año pasado, lleva aparejado, además de un cambio de logo, la promoción de un cambio de actitud social basado en pequeños gestos que resultan transformadores. Nuestro ADN canario sumado a nuestro espíritu emprendedor nos lleva a innovar siguiendo las pautas de una economía circular para contribuir al cambio positivo.