El Servicio de Empleo Público Estatal (SEPE) ha asumido en los últimos dos meses una ingente carga de trabajo a raíz de la presentación de un alto número de expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) en todo el país motivados por la hibernación económica derivada de la pandemia. Hasta ayer el servicios había reconocido y aprobado más de 3,4 millones de prestaciones por este tipo de expedientes laborales que el Gobierno flexibilizó para evitar los despidos y mantener así la fuerza laboral una vez concluyan todas las fases de desescalada. Son el 98% de todas las prestaciones solicitadas.
Ante el incremento de la carga de trabajo, se plantearon contrataciones temporales para agilizar trámites, en algunas bloqueadas. Mientras en la provincia de Las Palmas los 32 puestos ofrecidos quedaron cubiertos, en la de Santa Cruz de Tenerife de las 16 plazas ofrecidas solo se logró incorporar a 9. El resto renunció.
En Madrid fueron llamados 106 interinos, pero solo 57 tomaron posesión.
El SEPE recurrió a bolsa de empleo donde figuran personas que, por ejemplo, se presentaron a oposiciones y, aunque no obtuvieron plaza, superaron la nota de corte; o bien se inscribieron en un proceso exclusivo para cubrir bajas temporales. ¿Cuáles son los principales argumentos de quienes rechazan estos trabajos? En base datos del sindicato USO, uno es que han obtenido otro trabajo que le interesa más y el otro es que tienen a hijos menores a su cargo y no los pueden dejar solos en sus domicilios.
En marzo hubo un crecimiento notable en las altas de prestaciones. En la provincia de Santa Cruz de Tenerife se registraron 19.932 expedientes, mientras que en el mismo mes del 2019 llegaron a 13.910; es decir, 6.022 casos más, desde que el día 14 se decretara el estado de alarma. En Las Palmas, el pasado marzo hubo 18.481 altas de prestaciones, mientras que en 2019 fueron 15.119.
La Federación de Atención a la Ciudadanía de USO reclama un mayor esfuerzo para reforzar las plantillas del SEPE, "ante el aluvión de tramitaciones de prestaciones que han sobrecargado al funcionariado de forma desconocida hasta ahora". Hasta el 6 de mayo, había previsto incorporar 1.000 interinos de los que al final tomaron posesión 729 interinos.
El SEPE tiene 7.800 trabajadores. Con las nuevas incorporaciones temporales, "el refuerzo es de un 10% para un volumen de trabajo que se ha incrementado un 500%", según el sindicato. Los reconocimientos de prestaciones por ERTE "siguen formando un embudo que tiene a miles de familias sin ingresos y los funcionarios están trabajando a un ritmo demencial, que acabará pasándole factura a su salud", advierte Luis Deleito, secretario general de la Federación de Atención Ciudadana (FAC) de USO.
Madrid, Barcelona y Baleares son las provincias para las que más refuerzo se pidió, con 106, 81 y 70 plazas, respectivamente. Pero tomaron posesión 57 en Madrid, 80 en Barcelona y 58 en Baleares.
