El presidente de CaixaBank, Jordi Gual, afirmó ayer que las políticas económicas que se han implementado ante la crisis del coronavirus van en la dirección correcta, si bien consideró que la situación actual merece, además, un esfuerzo fiscal coordinado y sustancial a nivel europeo. Gual realizó estas declaraciones en la junta general ordinaria de accionistas de la entidad bancaria que, por primera vez, se realizó de forma telemática. En este encuentro, el presidente de CaixaBank también apostó por implementar "mecanismos de compartición del gasto entre países para evitar la distorsión del mercado único".

Gual celebró la iniciativa del presidente francés, Emmanuel Macron, y la canciller alemana, Angela Merkel, de crear un fondo de 500.000 millones de euros destinado a las regiones y sectores más afectados por la pandemia, una iniciativa de la que aseguró que es muy positiva y de la que se congratuló que saliera adelante.

Sobre el papel del Banco Central Europeo (BCE), el presidente de la entidad financiera española puso en valor la contundencia de su respuesta con programas de compras de deuda pública, inyecciones de liquidez al sistema financiero y la relajación de los requisitos prudenciales. En este sentido, Gual sostuvo que para la integridad de la zona euro "es fundamental que el BCE continúe garantizando que su política monetaria se transmite con efectividad a todos los países, independientemente de su situación fiscal".

En la junta general de accionistas, el presidente de CaixaBank afirmó que la incertidumbre generada por el Covid-19 dificulta dar previsiones sobre el futuro de la economía ya que la recuperación dependerá de la contención del virus, el acceso a una posible vacuna y a la efectividad de políticas económicas. "En CaixaBank estamos preparados para contribuir a la recuperación económica cubriendo las necesidades de financiación de nuestros clientes, ofreciendo ayuda a aquellos que más la necesitan e intensificando nuestra labor social", aseguró.