Antes y más agresivas. Las rebajas de verano regresan tras el confinamiento más combativas y más temprano de lo habitual con el objetivo de dar salida al stock acumulado durante los meses de cierre y recuperar el ritmo de venta marcado antes del estallido de la pandemia del coronavirus. La irrupción del Covid-19 supuso un duro revés para el sector, que en el comienzo de la temporada de primavera-verano se vio obligado a bajar la persiana, al igual que otros sectores como el turismo, para evitar una mayor propagación del virus. Tras los picos de venta registrados en los primeros compases del desconfinamiento, el ritmo de venta se ha moderado. Los comerciantes buscan ahora animar el consumo y dar un respiro a sus cajas mediante una campaña marcada por las incertidumbres que siembra la epidemia.

La liberalización de las rebajas en lo que a periodos, fechas y duración de las mismas se refiere a partir de 2012 neutralizó, en parte, el efecto llamada que las mismas conseguían antes de tal flexibilización. El Gobierno de Mariano Rajoy (PP) ponía fin en plena crisis económica a la regulación de las campañas de descuentos, de tal manera que los comercios no tenían que esperar a un día o periodo concretos para dar el pistoletazo de salida a sus rebajas, sino que podrían extender los descuentos y promociones a lo largo de todo el año. Pese a ello, las temporadas de rebajas continúan siendo una importante herramienta revitalizadora para el sector, que se agarra ahora más que nunca a su poder de convocatoria para afianzar su recuperación.

Tanto el pequeño comercio como las grandes cadenas y almacenes han colgado ya la cartelería de rebajas. Ambos segmentos coinciden en señalar que esta campaña de descuentos está marcada por el alto volumen de existencias que se encuentra bajo promoción tras la acumulación generada por el obligado cierre.

El secretario de la Federación de Áreas Urbanas de Canarias, Abbas Moujir, señala que prácticamente desde la tercera fase de la desescalada muchos comercios lanzaron campañas comerciales para atraer a los clientes. Ahora, y salvo excepciones, casi todo el pequeño comercio está inmerso en el periodo de descuentos. Moujir expone que estas son unas rebajas "atípicas" y más "agresivas" que en otras ocasiones. Los descuentos, que en buena medida parten del 50% o incluso del 70%, recuerdan al presidente de Fauca "a alguna etapa de la crisis de 2008". Ahora, insiste, se suma el añadido de la ausencia de turistas en las Islas. Pese a que el Archipiélago ya ha incrementado sus vuelos nacionales y se ha abierto a los enlaces internacionales con el arranque de la nueva normalidad, el sector turístico saldrá en julio solo con el 10% de las plazas. "En Canarias dependemos mucho del turismo y con la población que tenemos, si no tenemos el gasto externo, es difícil hacer previsiones", indica.

Aunque algunas estimaciones como la de la Asociación Empresarial del Comercio Textil, Complementos y Piel (Acotex) prevén para este año una facturación un 25% menor, los empresarios sostienen que aún es prematuro realizar una previsión. No es ese el sentir, en cualquier caso, de los comerciantes ubicados en Triana, una de las principales arterias para las compras de Las Palmas de Gran Canaria. El presidente de la Asociación de la Zona Comercial Triana, Carlos Bethencourt, asegura que el consumidor canario no les ha dado la espalda, lo que les ha permitido retomar "un nivel de venta bastante aceptable, casi a la par que el año pasado". Los establecimientos de esta zona -a excepción de las franquicias- esperarán al 1 de julio para dar el pistoletazo de salida a la campaña de verano y coincidir, además, con el primer fin de semana tras el confinamiento en el que se podrá llevar a cabo actividades al aire libre.

Pero no solo el pequeño comercio anima las compras con rebajas de precios, pues también las grandes cadenas comenzaron desde hace días la campaña, tanto en el espacio online como en las tiendas físicas. Es el caso de los buques insignias del grupo Inditex y de El Cortes Inglés, que han adelantado al último jueves de este mes la temporada de descuentos. El secretario general de la Asociación Canaria de Medianas y Grandes Empresas de Distribución (Asodiscan), Alfredo Medina, sostiene que el adelanto no se produce por la crisis del coronavirus, ya que desde la liberalización de las rebajas se han producido anticipos en otras ocasiones. Medina resalta, en cualquier caso, que en esta ocasión "hay más mercancía que nunca" y un mayor número de unidades en descuento y promoción. De hecho, uno de los principales objetivos del sector es dar salida al stock acumulado. Motivos tienen de sobra: vender la mercancía que "envejece" por ser de temporada, evitar problemas de espacio para el almacenamiento y reforzar la liquidez de cara a la campaña de otoño-invierno.