La ministra de Hacienda y Portavoz del Gobierno, María Jesús Montero, cargó ayer contra quienes piden que se realicen test a los viajeros que vengan a España para evitar que haya rebrotes por casos importados. La crítica, aunque sin citar expresamente, iba dirigida al Partido Popular, que ha reclamado estos controles y especialmente a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, quien ha pedido un plan Barajas que incluya los test a los viajeros.

Pero el de Ayuso no es único gobierno autonómico en ese empeño, también lo viene exigiendo desde hace varias semanas el presidente de Canarias, del PSOE, Ángel Víctor Torres, quien ha realizado este planteamiento de manera reiterada en las videoconferencias que durante 14 domingos seguidos ha tenido el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, con los mandatarios autonómicos.

La portavoz del Ejecutivo se escudó ayer en que se hacen controles documentales y de temperatura en los aeropuertos "en consonancia" con las recomendaciones de la Comisión Europea y también con la colaboración de la agencia de seguridad aérea y el Centro Europeo para la Prevención y Control de Enfermedades. Y cargó directamente contra quienes reclaman de manera insistente los test a los turistas. "¡Flaco favor hacen al sector turístico y a nuestra economía quienes día a día ponen en duda que se están realizando los controles necesarios!", espetó. En su opinión, hay quienes parece que se han instalado en una actitud de protesta permanente "sin importar si su afán de crítica al Gobierno se lleva por delante a miles de empresas que viven del turismo de nuestro país".

María Jesús Montero considera "irresponsable" alentar lo que, desde su punto de vista, son "falacias" en torno a este tema, alegando que hasta las pruebas diagnósticas que son más eficaces, como son las PCR, "son la foto fija de un momento, de un instante" y por ello, sostiene, la UE no las recomienda de forma genérica en el control del tránsito.

Montero considera que "lo que de verdad importa", y lo que el Gobierno ha trabajado de la mano del sector y de los demás países, es que las medidas sean "viables y útiles" para hacer un seguimiento lo más temprano posible. Sostiene la ministra que estas medidas, pactadas con otros países, se están aplicando "a rajatabla" en las fronteras en España.

La consejera canaria de Turismo, Yaiza Castilla, se mantuvo ayer en sus trece: Canarias seguirá adelante con su reivindicación. Esos test, a la llegada si no se puede hacer en origen, es la mejor manera de garantizar la imagen de Canarias como destino turístico. La marca Islas Canarias, asegura, no se puede permitir que un rebrote 'importado' echa por tierra el esfuerzo realizado hasta ahora por todo el sector.

Curiosamente, la vehemencia de la ministra Montero contrasta con el documento conocido ayer y elaborado por el plantel de expertos, bajo la coordinación de Rafael Doménech, jefe de Estudios del BBVA, a los que el Ministerio de Asuntos Exteriores pidió una hoja de ruta para reactivar el tráfico de pasajeros internacional sin riesgos para salud. El documento, según publica Eleconomista.es, incluye entre sus recomendaciones la necesidad de realizar a los pasajeros test antes de viajar para intensificar los cribados y reducir el riesgo de contagiado. Sólo si los viajeros provienen de zonas con el mismo nivel de penetración y virulencia del virus, esas pruebas se podrían obviar. Exteriores aduce que ese informe "es de uso interno".

El PP también hace oídos sordos a las arremetidas de Montero. El grupo parlamentario popular registró ayer en el Congreso una proposición no de ley en la que insiste en reclamar al Gobierno que implante medidas de seguridad sanitaria "y apruebe un protocolo específico para garantizar los corredores de tránsito de viajeros seguros, que debe comenzar por implantación test de detección de Covid en origen". El PP sostiene en su propuesta que el 21 de junio los aeropuertos españoles reanudaron su actividad con 650 operaciones, "bajo la promesa de constituirse como destinos y aeropuertos seguros, pero las medidas no iban más allá de una mera declaración responsable por parte de los pasajeros".